La franja este de la región núcleo enfrenta complicaciones tras las recientes lluvias, con acumulados superiores a los 100 mm en los últimos siete días. Esta situación ha resultado en lotes de soja bajo agua y maíces con atrasos en la cosecha, además de riesgos de pérdida de calidad de semilla debido a condiciones de vuelco y quebrado.
Así lo indicó recientemente un reporte de la Bolsa de Comercio de Rosario , que analizó los efectos de las lluvias de los últimos días. A pesar de estos desafíos, las precipitaciones también han contribuido a mejorar las reservas de agua del suelo, lo que es una noticia positiva de cara a la siembra fina.
Los pronósticos a corto plazo son alentadores, sin lluvias esperadas hasta al menos el miércoles 27, lo que permitiría avanzar en la cosecha. Esa estabilidad ofrece una ventana de oportunidad para las actividades agrícolas antes de la probabilidad de chaparrones aislados e intermitentes sobre el oeste y sudoeste de la zona. Según los expertos, la última parte de marzo se proyecta como un período más seco en comparación con las primeras semanas del mes, lo que podría facilitar la recuperación de los cultivos y las labores de cosecha.
Por otro lado, los suelos de la región núcleo siguen acumulando humedad, alcanzando niveles de óptimos a excesivos en el sector este, y de regulares a adecuados en el oeste. Mientras algunas áreas mantienen proyecciones de rendimiento optimistas gracias a condiciones climáticas más favorables, otras enfrentan el desafío del exceso de humedad y sus posibles impactos en la calidad de los cultivos.
La cosecha de maíz temprano se encuentra en una etapa inicial, con un avance de tan solo el 11% debido a las lluvias recurrentes. Algunos productores consideran la posibilidad de cosechar con niveles de humedad superiores a lo ideal para evitar costos adicionales de secado, especialmente en lotes donde se ha observado granos brotados.
En el noreste de Buenos Aires y sur de Santa Fe, el temporal ha afectado la condición de la soja de primera, aumentando los lotes en condiciones regulares a malas. Sin embargo, en otras zonas de la región, las precipitaciones no han generado mayores problemas, y se esperan beneficios para la soja de segunda que aún está llenando granos.