Los precios de la hacienda siguen bajos, mientras crecen los costos de insumos para la alimentación. Pero la ocupación de los corrales es alta por la salida de hacienda desde los campos afectados por la sequía.
Desde la Cámara Argentina de Feedlot (CAF) advirtieron que la actividad atraviesa por la peor crisis en más de una década por la sequía, que provoca una elevada ocupación de los corrales. En este contexto, el precio de la hacienda se mantiene bajo, mientras aumenta el costo de los insumos.
"El negocio atraviesa una de las crisis más grandes de los últimos 10 o 12 años por lo prolongado de la situación, con descapitalización y pérdidas que se sostienen muy altas por cabeza encerrada", explicó el presidente de la Cámara Argentina de Feedlot (CAF), Fernando Storni.
Por eso, aunque los números del negocio no cierran, el año arrancó con un incremento del 1,78% en la ocupación de los corrales de engorde y recría de hacienda vacuna, como consecuencia de la prolongación de la sequía que afecta a más de la mitad del territorio nacional y obliga a los productores ganaderos a desprenderse de sus animales por la falta de pasto y de forrajes.
"Suponíamos que la baja iba a ser mayor pero la continuidad de la sequía hizo que siga entrando hacienda en los corrales, porque la situación es crítica", dijo Storni.
Al 1° de enero, el porcentaje ocupado llegó al 59,44% mientras que un mes antes era del 57,66%. Según el Servicio Nacional de Sanidad Agroalimentaria (SENASA), sin embargo, se registra una caída del 1% en el stock total, menor a la esperada por los feedloteros para la época y la mala situación que atraviesa el sector.
Tal como calculó la CAF, las empresas perdieron $20.163 por cabeza, y $41.853 si se tiene en cuenta la utilidad antes de impuestos con costo financiero.
De acuerdo con el relevamiento, la capacidad de encierre al comienzo de enero era de 728.310 cabezas, con una permanencia en los corrales de 124 días para engorde y recría, siendo mayor la ocupación en las empresas más grandes.
Las empresas perdieron $20.163 por cabeza, y $41.853 si se tiene en cuenta la utilidad antes de impuestos con costo financiero. (Foto: Clarín)
Por su parte, el Índice de Reposición Feedlot que indica los animales ingresados por cada animal vendido, se ubicó en 1,12; y el ingreso de animales en relación con la capacidad de los corrales fue del 16,36%. En tanto, las ventas sobre el stock, medida al 1° de diciembre de 2022, fueron del 25,29%.
Según el informe, del total de empresas relevadas, un 46,39% estaba en fase de llenado, mientras que un 52,59% reportó situación de vaciado de corrales.
Analizando el negocio, Storni comento: "Todavía falta para la recuperación del gordo, aún nos mantenemos con volúmenes mayores a otros años dentro de los corrales frente a una demanda interna restringida por el bajo poder adquisitivo y una demanda externa con precios internacionales en baja, sumado a las restricciones de nuestro país con cortes prohibidos y un diferencial en el tipo de cambio que no ayuda a la tracción de la industria exportadora".
En cuanto a los insumos, los empresarios todavía siguen sintiendo las consecuencias del "dólar soja 2?, que incrementó los costos de alimentación de la hacienda, tal como ocurrió en la primera edición del Programa de Incremento Exportador (PIE) de septiembre, que impulsó al alza los precios de los granos y subproductos utilizados en los corrales.
La merma en las cosechas esperadas de maíz, debido a la sequía que impidió la siembra de gran parte de los cultivos y provoco la pérdida de la mitad de los implantados en fechas tempranas, es otro factor que empuja a las cotizaciones del cereal hacia arriba.
En este escenario, "los productores estarán vendiendo sus granos a cuentagotas en la medida que necesiten dinero para afrontar gastos", agregó Storni.