Rusia aseguró hoy que el ataque del sábado contra el puerto de la ciudad ucraniana de Odesa "no puede ni debe" afectar la exportación de cereales, después del acuerdo cerrado un día antes entre Moscú y Kiev en Turquía.
El ataque "se centró exclusivamente en la infraestructura militar. No tuvo nada que ver con la infraestructura que se utiliza para cumplir con los acuerdos y exportar granos", manifestó el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov.
"Por lo tanto, esto no puede ni debe afectar de ninguna manera el inicio del proceso de envío", añadió, en declaraciones recogidas por la agencia Sputnik.
Rusia y Ucrania firmaron el viernes en Estambul un acuerdo mediado por la ONU y Turquía que permite reanudar las exportaciones de granos ucranianos a través del mar Negro, bloqueadas a partir de la guerra, así como de cereales y fertilizantes rusos, afectados por las sanciones internacionales, y que busca aliviar la crisis alimentaria global desatada por la guerra.
Al día siguiente, Moscú lanzó un ataque contra el puerto de Odesa, clave para la exportación de cereales, pero argumentó que destruyó un galpón con misiles enviados a Ucrania por Estados Unidos y aseguró que respetaría el acuerdo.
El Comando Militar Sur de Ucrania dijo que ninguna instalación de almacenamiento de granos había sido atacada.
Peskov reclamó hoy a Naciones Unidas que "haga su parte" para retirar las restricciones a las exportaciones rusas y apuntó a la necesidad de que el mecanismo pactado para las exportaciones de granos sea puesto en marcha antes de valorar su efectividad, según recogió la agencia rusa de noticias TASS.
Las declaraciones del portavoz ruso reafirman el pedido del canciller Serguei Lavrov de la víspera, que pidió al secretario general de la ONU, António Guterres, que facilite el levantamiento parcial de las sanciones para facilitar la implementación del acuerdo.
El ataque contra el puerto de Odesa fue recibido con preocupación por Turquía, garante del acuerdo, y fue condenado por Estados Unidos, la Unión Europea, Naciones Unidas y la propia Ucrania, que denunció el lanzamiento de al menos cuatro misiles Kalibr, dos de los cuales impactaron en las instalaciones portuarias.
En virtud del acuerdo, una coalición de personal turco, ucraniano y de la ONU supervisará la carga de granos en los buques en los puertos ucranianos de Odesa, Chernomosk y Pivdenyi, antes de navegar por una ruta planificada previamente a través del mar Negro.
El pacto establece que rusos y ucranianos se comprometían a suspender cualquier ataque contra los barcos o los puertos que participen en estas exportaciones.
El bloqueo de los cargamentos y exportaciones de cereales y fertilizantes rusos impedidas por sanciones internacionales disparó los precios de productos como el trigo y la cebada.
Ucrania es uno de los mayores exportadores mundiales de trigo, maíz y aceite de girasol, pero la invasión de Rusia, lanzada el 24 de febrero, y el bloqueo de sus puertos han detenido su envío al exterior.