Las tensiones entre Rusia y Ucrania han aumentado tras la decisión de Rusia de abandonar el acuerdo de exportación de granos negociado por la ONU, lo que ha generado preocupaciones sobre el suministro de granos a nivel mundial. Según Rusia, los ataques a los puertos de granos de Ucrania son "ataques masivos de venganza" en respuesta al derribo de un puente carretero hacia Crimea por parte de Ucrania.
El acuerdo de exportación de granos, que data de un año atrás, involucra a ambos países como principales exportadores de granos. Sin embargo, el retiro de Rusia del acuerdo ha desencadenado una serie de ataques contra los puertos de Crimea, causando daños en la infraestructura portuaria y casas cercanas.
El conflicto ha llevado a una preocupante situación en el suministro de alimentos, ya que ambas naciones son importantes actores en el mercado global de granos. Andriy Yermak, jefe del gabinete presidencial de Ucrania, expresó su alarma ante los ataques rusos a los puertos y acusó a Rusia de poner en peligro a millones de personas en países que dependen de las exportaciones de alimentos de Ucrania.
El ataque a los puertos de granos involucró seis misiles Kalibr y 36 drones, con varios de los drones derribados por las fuerzas ucranianas. Rusia informó que sus fuerzas avanzaron 2 kilómetros cerca de Kupiansk.
La decisión de Rusia de abandonar el acuerdo ha generado preocupación a nivel internacional. El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, expresó que esta medida afectará gravemente a las personas necesitadas en todo el mundo.
Rusia manifestó que estaría dispuesto a regresar al acuerdo si se cumplen todos sus requisitos. Por su parte, Ucrania solicitó que el acuerdo continúe sin la participación de Rusia. Turquía ha ofrecido intermediar para que Rusia regrese al tratado, pero Rusia ha señalado que un acuerdo sin su participación no ofrece garantías. La situación sigue siendo tensa y sigue afectando el comercio de granos y la seguridad alimentaria a nivel global.
