A pesar de mantenerse en los niveles más bajos en cuatro años, la soja comenzó a mostrar signos de recuperación en la Bolsa de Chicago. Este repunte fue impulsado por el interés de compradores internacionales, atraídos por las cotizaciones deprimidas. En la última semana, el contrato de septiembre sumó un 3,2%, subiendo de 349,80 a 360,82 dólares por tonelada. De igual manera, el contrato de noviembre cerró con una suba del 2,8%, al pasar de 357,52 a 367,44 dólares por tonelada.
El Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA) informó ventas de soja 2024/2025 por 2.615.800 toneladas, superando las expectativas del mercado. China lideró las compras con 870.000 toneladas, mientras que otras 845.000 toneladas fueron atribuidas a "destinos desconocidos", que usualmente están relacionados con la demanda china. Además, en operaciones diarias confirmadas por el USDA, China adquirió otras 396.000 toneladas.
Los especialistas señalan que, además de aprovechar una soja más barata, China podría estar acelerando sus compras para evitar posibles aumentos arancelarios si Donald Trump es reelegido en noviembre. Sin embargo, esta recuperación en los precios deberá mantenerse para contrarrestar la presión bajista que se espera con el avance de una cosecha récord en Estados Unidos, proyectada por el USDA en 124,90 millones de toneladas y por ProFarmer en 129 millones de toneladas.
El maíz también registra un alza
El maíz tuvo una tendencia similar a la de la soja, con subas en las últimas jornadas. El contrato de septiembre en Chicago sumó 2,46 dólares, mientras que el de diciembre aumentó 1,97 dólares. En la semana, estos contratos recuperaron un 2,8% y un 2,6%, respectivamente.
La demanda internacional fue clave en este repunte, con ventas semanales de maíz estadounidense que alcanzaron 1.494.100 toneladas, superando las expectativas. México fue el principal comprador con 419.700 toneladas.
Con la cosecha de maíz en marcha en Estados Unidos, se espera que en los próximos días las máquinas entren en las principales regiones agrícolas. Aunque la producción no será récord, se espera un volumen considerable. El USDA proyecta una cosecha de 384,74 millones de toneladas, mientras que ProFarmer la estima en 380,48 millones.
El trigo encuentra soporte en la Unión Europea
El trigo también logró recuperarse tras la caída de la semana anterior. Los contratos de septiembre en Chicago y Kansas cerraron con subas del 6,1% y 6,3%, respectivamente.
El soporte para el trigo vino desde la Unión Europea, donde los principales países productores enfrentaron una mala campaña debido a excesos de humedad. La Comisión Europea ajustó su estimación de producción de trigo blando de 120,80 a 116,10 millones de toneladas, lo que representaría la menor producción en cuatro años. Además, redujo su previsión de exportaciones a 26 millones de toneladas, frente a los 32 millones previstos anteriormente.
La Unión Europea se mantiene como el segundo mayor exportador de trigo a nivel mundial, solo detrás de Rusia.
