La situación climática para la siembra de girasol en la temporada 23/24 se presenta desafiante, con un pronóstico de descenso de temperatura y escasas precipitaciones en gran parte del área agrícola. Aunque se espera que las lluvias sean ligeras a nulas, existe el riesgo de heladas que podrían afectar los cultivos.
Durante la primera etapa del pronóstico, se espera la finalización de un frente de tormenta que ingresó en días anteriores. Sin embargo, este frente ha perdido gran parte de su energía y solo se prevén lluvias dispersas, especialmente en el extremo norte y la Cordillera Sur. En general, se pronostican precipitaciones escasas a nulas en la mayor parte del área agrícola argentina, uruguaya y paraguaya.
Junto con el frente de tormenta, una masa de aire polar llegará a la región, provocando un descenso térmico significativo y varios días de tiempo frío. Esto aumenta el riesgo de heladas localizadas y generales en gran parte del área agrícola, a excepción del extremo norte. Las temperaturas mínimas oscilarán entre 0 y 5°C en el centro del NOA, la Región del Chaco, la Mesopotamia, el sudeste del Paraguay, gran parte de Cuyo, la Región Pampeana y Uruguay, con posibilidad de heladas localizadas. En áreas serranas y cordilleranas, así como en algunas zonas específicas, las temperaturas mínimas podrían ser inferiores a 0°C, con riesgo de heladas generales.
En cuanto a los vientos, se espera un retorno de los vientos del trópico con poca energía, lo que provocará un ascenso térmico en el norte del área agrícola y temperaturas ligeramente por debajo de lo normal en el centro y sur. Se pronostican temperaturas máximas superiores a 15°C en el este del NOA, la Región del Chaco, la Mesopotamia y el oeste del Paraguay, mientras que en la mayor parte del NOA, Cuyo, la Región Pampeana y Uruguay se esperan temperaturas máximas entre 10 y 15°C. Solo en zonas serranas y áreas específicas se registrarán máximas inferiores a 10°C.
En resumen, la falta de precipitaciones y el descenso de temperatura representan un desafío para la siembra de girasol en la temporada 23/24. Los agricultores deben tomar precauciones ante el riesgo de heladas y monitorear de cerca las condiciones climáticas para tomar decisiones informadas en relación con sus cultivos.
