La producción argentina de batata suma un nuevo impulso de la mano de una alianza estratégica entre el INTA San Pedro y la empresa Francisco Manresa SA, una pyme de larga tradición familiar con base en San Pedro, Buenos Aires. Tras un primer año de trabajo conjunto, ambas partes renovaron su convenio con el objetivo de mejorar la calidad del cultivo, incorporar genética nacional y fortalecer la exportación.
La articulación se centra en ensayos colaborativos, validación de herramientas en condiciones reales y mejoras en el proceso productivo. Según explicó Laura Hansen, directora del INTA San Pedro, "la experiencia demuestra el impacto positivo cuando empresas líderes adoptan nuevas prácticas y variedades".
Una de las principales apuestas es la variedad Capicúa INTA, registrada en 2023, que se está evaluando junto a la empresa. Esta batata de ciclo corto o mediano destaca por su alto contenido de betacaroteno, pulpa anaranjada y piel morada oscura resistente al lavado, ideal para la exportación y la industria alimentaria.
"El caudal de conocimiento del INTA y la capacidad técnica son claves para una pyme como la nuestra. Esta alianza potencia nuestras capacidades", sostuvo Sebastián Manresa, representante de la firma que ya lleva cuatro generaciones dedicadas al cultivo de batata.
Actualmente, la empresa trabaja sobre 200 hectáreas en distintas regiones del país, desde San Pedro hasta Córdoba, Chaco y Formosa, alcanzando rendimientos promedio de 20 toneladas por hectárea. Además, comercializan su producción todo el año bajo la marca Reina Batata.
Según el técnico del INTA San Pedro, Martín Ferrari, el convenio no solo impacta en los rindes y calidad, sino también en la planificación estratégica del cultivo: "Ya pensamos en la batata de la próxima campaña mientras producimos la actual", comentó.
La articulación también incluye estudios sobre rotación de cultivos, análisis de suelo y comparación de características organolépticas entre la batata del norte argentino y la de la zona bonaerense. Estas investigaciones buscan no solo mejorar el rendimiento, sino también adaptarse a las exigencias del mercado internacional.
Con esta iniciativa, el INTA y la empresa Francisco Manresa SA buscan consolidar a la batata argentina como un producto de calidad exportable, reforzando el valor agregado desde el conocimiento científico hasta el acondicionamiento y comercialización final.