En una jornada marcada por movimientos alcistas, los futuros de la soja en el mercado de Chicago cerraron en 386,9 USD por tonelada, alcanzando su nivel más alto en tres meses tras un recorte inesperado en las proyecciones de producción y stocks finales de Estados Unidos, según el informe WASDE del Departamento de Agricultura de EE.UU. (USDA). Este impulso también benefició al maíz, que cerró en 187,6 USD, y al trigo, que se posicionó en 200,3 USD por tonelada.
El informe del USDA reveló que los stocks globales de soja cayeron a 128,4 millones de toneladas (Mt), una disminución de 3,5 Mt respecto al informe anterior. Este ajuste, combinado con menores producciones estimadas en Estados Unidos, encendió las alarmas en el mercado global y alimentó la especulación sobre una oferta más ajustada en el corto plazo.
En tanto, las proyecciones para Brasil se mantuvieron optimistas, con una cosecha de soja estimada en más de 170 Mt, lo que podría equilibrar parcialmente el panorama. No obstante, las lluvias han retrasado la cosecha temprana en algunas regiones de Brasil, con solo un avance del 0,3% de la superficie sembrada, muy por debajo del 2,3% alcanzado en el mismo período del año pasado, según AgRural.
El escenario local: precios al alza y dudas por la sequía
En el mercado argentino, los efectos de las subas externas impulsaron los valores locales:
Soja:$295.000 por tonelada, con un alza de $2.000.
Maíz:sin variaciones, a $205.000 por tonelada.
Trigo:sin cambios, a $197.000 por tonelada.
A pesar de estas mejoras, las perspectivas climáticas siguen preocupando. Dante Romano, profesor del Centro de Agronegocios y Alimentos de la Universidad Austral, advirtió que la sequía continúa afectando las expectativas de producción en Argentina. "El estado de los cultivos perdió dos puntos, con un 49% en condiciones de bueno a excelente, aunque sigue siendo uno de los mejores registros en cinco años", destacó.
Los pronósticos indican lluvias para el 18 de enero, aunque las precipitaciones esperadas para esta semana se han desplazado hacia el norte, beneficiando al NOA y NEA, pero dejando al centro y sur del país con niveles insuficientes.
Maíz y trigo: perspectivas dispares
El maíz se encuentra en una situación mixta. Los cultivos de primera ya han florecido, mientras que los de segunda están en desarrollo vegetativo, lo que podría permitir cierta recuperación si las lluvias regresan a fines de enero. Por otro lado, el trigo argentino enfrenta una comercialización lenta y presionada por la oferta rusa, cuyos precios más altos están generando espacio para las exportaciones locales.
Dudas sobre la rentabilidad
Aunque el maíz de abril alcanzó los 185 USD por tonelada, generando buena rentabilidad, la soja aún no supera los 280 USD, lo que pone en jaque la viabilidad económica para los productores locales. "Con rendimientos bajos debido a la sequía, los valores actuales no son suficientes para garantizar márgenes positivos", subrayó Romano.
Mientras los mercados internacionales responden a los ajustes del USDA con subas significativas, en Argentina las condiciones climáticas y la incertidumbre sobre la producción siguen marcando el ritmo. Los próximos días serán clave, tanto para el mercado local como para las perspectivas globales, a medida que se define el impacto de la sequía y las lluvias en las principales regiones productivas del país.
