En un giro inesperado que sacude al mercado agrícola, el precio de la soja se desplomó, arrastrando consigo a los negocios en Rosario, tras una semana de importantes bajas en Chicago. Este fenómeno contrasta con el trigo, que vio una cotización al alza, apuntalada por las tensiones en la región del Mar Negro y preocupaciones sobre el suministro del cereal.
Según la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), la caída de más de US$ 7 por tonelada en los futuros de soja fue motivada por una toma de ganancias, tras las mayores cotizaciones observadas esta semana. Esta situación fue exacerbada por las lluvias pronosticadas para el Medio Oeste estadounidense, que presionaron aún más los precios.
En Rosario, los precios ofrecidos por la exportación alcanzaron los $265.000 por descargas cortas, pero la caída en las cotizaciones de Chicago resultó en una oferta de $260.000 por tonelada. Además, los contratos de granos gruesos se vieron presionados, con el maíz cerrando a la baja debido a las previsiones de lluvias beneficiosas en el cinturón de cultivos del Medio Oeste de Estados Unidos.
Mientras tanto, los futuros del trigo registraron ganancias, con la situación geopolítica entre Rusia y Ucrania generando incertidumbre sobre la disponibilidad de este cereal en el mercado global. A esto se suma la propuesta de la Comisión Europea de imponer aranceles a las importaciones de grano de Rusia y Bielorrusia, aunque se considera una medida más simbólica que práctica.
En cuanto a los precios locales, en Rosario el trigo finalizó la semana cotizando a $170.000 por tonelada, mientras que en el sur, específicamente en Bahía Blanca, el precio del trigo disponible alcanzó los $165.000. Este escenario destaca la volatilidad del mercado agrícola y la interconexión entre los eventos globales y los precios locales, dejando a los productores en una situación de incertidumbre y expectativa ante los próximos movimientos del mercado.