En una reciente discusión con Tyne Morgan de US Ag Report, Don Close, jefe de investigación y análisis de Terrain Ag, y Matt Bennett de AgMarket.net, abordaron las incidencias climáticas y su impacto en el sector agrícola y ganadero. Las lluvias recientes, aunque beneficiosas para las pasturas, han generado incertidumbre sobre la posibilidad de expandir la producción de ganado en EE.UU.
Close destacó que, aunque las lluvias han mejorado las pasturas, muchos productores aún no tienen las condiciones óptimas para considerar la expansión debido a cuestiones financieras. Explicó que restaurar el equilibrio financiero es un paso crucial antes de pensar en aumentar la capacidad productiva. Según Close, la reciente humedad en las zonas de pasto es un factor positivo, pero la expansión es un proceso gradual que requiere una planificación cuidadosa.
Por otro lado, Matt Bennett señaló las condiciones climáticas adversas en ciertas áreas como el centro y suroeste de Kansas y el sureste de Colorado, que siguen enfrentando una gran sequía. Esta situación ha impactado el mercado de granos, con incrementos en los precios del trigo KC en Chicago debido a preocupaciones climáticas en las llanuras occidentales.
Bennett también comentó sobre la posibilidad de un verano muy seco en las llanuras occidentales y el cinturón maicero occidental de EE.UU., lo cual podría afectar negativamente tanto a la agricultura como a la ganadería en esas áreas. A pesar de las esperanzas de más lluvias que mejoren los pastos, él advierte que aún no se ha superado el riesgo de sequía a gran escala.
En cuanto a la demanda de productos agrícolas y ganaderos, Close observa que la demanda ha sido sólida en todas las especies, con la carne de vacuno manteniendo un liderazgo en ganancias frente a otras carnes. Sin embargo, advierte que las presiones inflacionarias están comenzando a afectar a los consumidores, como lo indican las ganancias más lentas de empresas como Starbucks y varios restaurantes de comida rápida.
Finalmente, Bennett tocó el tema de las ventas de maíz y la producción de etanol, sugiriendo que las exportaciones y la demanda de etanol podrían mantenerse fuertes, lo cual es crucial para el sector agrícola. La demanda podría incluso incrementar según el USDA hacia la temporada de cosecha, contribuyendo positivamente al mercado agrícola.
