El presidente de la Federación Panaderil de la provincia de Buenos Aires (Fipba), Raúl Santoandré, expresó "total apoyo" al Fondo Estabilizador del Trigo Argentino (FETA) al considerar que desde su implementación en marzo del año pasado permitió "sostener el precio del pan".
"Manifestamos el total apoyo al Fondo Estabilizador del Trigo Argentino, el cual permitió inmediatamente desde su implementación sostener el precio del pan, espaciando en el tiempo los aumentos que inevitablemente debían darse por la inflación", dijo Santoandré en declaraciones a Télam Radio.
El directivo señaló que "su efectividad es indiscutible, permitiendo que no falte el pan en la mesa de los que menos tienen, del alimento más consumido por los argentinos".
Asimismo, consideró que "el fondo estabilizador del trigo argentino podría mejorarse en el sentido de establecer un porcentaje mínimo de gluten para la comercialización de harina con el subsidio FETA".
La semana pasada, el Gobierno nacional decidió destinar al FETA un importe equivalente en hasta 1,3 puntos porcentuales de la alícuota del derecho de exportación de la soja y sus derivados, renovando los fondos para la herramienta y prolongando así su vigencia.
En el decreto 288/2023, se indicó que "el FETA ha resultado una herramienta adecuada durante 2022 para mitigar el impacto de la situación en el mercado interno -producto de la invasión rusa en Ucrania".
Luego de esa medida, la Federación Argentina de la Industria Molinera (FAIM) expresó en un comunicado disconformidad del conjunto mayoritario de molinos que la componen "acerca de la decisión del Gobierno nacional de continuar financiando un mecanismo de compensación ineficaz y parcial para la harina".
"La justificación para la intervención del mercado de trigo se basó en el impacto de la guerra entre Rusia y Ucrania, pero -avanzado el conflicto- esa situación ya no tiene vigencia", indicó FAIM.
La entidad agregó que "la industria considera que las medidas para asegurar el acceso al pan deben concentrarse en la demanda y no en la oferta" y solicitó "desactivar con urgencia este sistema de subsidios que perjudica seriamente a la enorme mayoría de los molinos".
Asimismo, molinos pyme agrupados en Apymimra rechazaron el Decreto 288/2023 y aseguraron que "la incidencia del trigo en el precio del pan es marginal, esta herramienta no estabiliza el precio del kilo de pan, y por lo tanto no ayuda a los sectores más vulnerables".
"Creemos que el subsidio a la demanda, a través de la Tarjeta Alimentar, es una alternativa más efectiva y transparente en pos de garantizar el acceso de las personas de menores recursos a los productos farináceos de primera necesidad", concluyó.