según el Censo de Agricultura del USDA. Carolina del Norte ocupa el segundo lugar, mientras que Michigan y Washington completan el podio.
La última edición del Censo de Agricultura reveló que Oregón cuenta con 48.400 acres dedicados a la producción de árboles de Navidad, principalmente en el corredor I-5 en el oeste del estado.
Por su parte, Carolina del Norte, el segundo mayor productor, alcanzó ventas por 119,6 millones de dólares, lo que equivale a una cuarta parte del total nacional. Las plantaciones de árboles en este estado están concentradas en la región occidental, donde la cordillera Blue Ridge ofrece condiciones ideales para el crecimiento de estos árboles, especialmente amantes del frío.
Michigan: Vendió 45 millones de dólares en árboles en 2022, con 33.100 acres dedicados a este cultivo. Las plantaciones están distribuidas por todo el estado, desde las áreas heladas del norte hasta las regiones rurales del sur.Washington: Generó 35 millones de dólares, con sus granjas también concentradas en la parte occidental del estado a lo largo del corredor I-5.
Más allá de las ventas directas, la producción de árboles de Navidad es clave para el agroturismo, un sector en crecimiento en las comunidades rurales. Según datos del USDA, los ingresos del agroturismo se triplicaron entre 2002 y 2017, destacando la importancia de estas actividades estacionales en la economía local.
"Las grandes granjas de árboles cortados por uno mismo generan ingresos adicionales cuando los visitantes aprovechan para almorzar en restaurantes locales o hacer compras en otros negocios", explicó Jill Sidebottom, portavoz de la Asociación Nacional de Árboles de Navidad.
Además de su impacto económico, la producción de árboles de Navidad cumple una función ambiental clave al preservar tierras agrícolas que no serían aptas para otros cultivos. Según Sidebottom, estos árboles suelen plantarse en terrenos rocosos o empinados, evitando que estas áreas se vendan para desarrollos inmobiliarios.
"La gente puede ganar dinero con sus tierras en lugar de venderlas para construir casas de vacaciones", destacó Sidebottom.
La producción de árboles de Navidad no solo proporciona beneficios económicos y ambientales, sino que también fomenta la conexión entre las comunidades rurales y el resto del país, convirtiéndose en una tradición festiva que impulsa la economía local y preserva la identidad de estas regiones.
Con Oregón y Carolina del Norte a la cabeza, estos estados continúan siendo el corazón de una industria que, año a año, viste de verde las celebraciones navideñas en todo Estados Unidos.