Un trabajador lechero en Michigan ha sido diagnosticado con gripe aviar, marcando el segundo caso conocido de transmisión de vaca a humano en Estados Unidos. Los Centros para el Control de Enfermedades (CDC) confirmaron el diagnóstico, señalando que, aunque el riesgo para el público sigue siendo bajo, el trabajador experimentó síntomas leves, incluida conjuntivitis.
El incidente subraya la continua preocupación por las transmisiones zoonóticas en ambientes agrícolas y ha impulsado al Departamento de Agricultura de EE. UU. (USDA) a expandir su apoyo financiero a los productores lecheros, incluso aquellos con rebaños no infectados, en un esfuerzo por fortalecer las medidas de bioseguridad.
Desde el surgimiento del virus H5N1 en rebaños lecheros a principios de año, Michigan ha reportado la mayor cantidad de casos. A pesar de la baja incidencia de transmisión persona a persona, los CDC y el USDA están tomando precauciones adicionales, incluyendo la implementación de un programa de seguimiento activo para aquellos en contacto directo con animales potencialmente infectados.
La situación ha llevado a los CDC a recomendar que los trabajadores agrícolas utilicen equipo de protección personal y ha fomentado un diálogo sobre la necesidad de una preparación más robusta contra futuros brotes. Este enfoque preventivo busca evitar interrupciones significativas en el sector agrícola y proteger la salud pública.