Esta medida responde a una política fiscal del gobierno de Javier Milei, que ha decidido aplicar los retrasados aumentos tributarios en cuatro fases. La próxima suba está programada para comenzar esta medianoche.
El impuesto a los combustibles había estado congelado desde mediados de julio.La suba prevista del 8% podría repartirse en dos tramos, uno en mayo y otro en junio, dependiendo de las negociaciones de última hora.YPF, Shell, Axion y Puma Energy, principales actores del mercado, aún no han confirmado el porcentaje exacto de aumento que aplicarán.Según el Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF), el incremento del impuesto debe ser del 53% para recuperar su valor real, ajustando así la inflación del año pasado.
Con la actualización de mayo, se espera integrar completamente la inflación de 2023 al valor del impuesto.Para el 1 de julio, se anticipa otro aumento significativo del 51.6%, que elevará el tributo a $306 por litro, siguiendo la inflación del IPC del INDEC del primer trimestre de 2024.
Los consumidores deberán enfrentar mayores costos en combustibles, lo que podría afectar la economía general y los gastos de transporte individual y comercial.