La operación se llevó a cabo en el Hospital General de Massachusetts el pasado 16 de marzo, donde Slayman recibió un riñón de cerdo con 69 ediciones genómicas. Aunque fue dado de alta el 3 de abril con resultados de salud favorables, su deceso ocurrió inesperadamente y, según el hospital, no está directamente relacionado con el trasplante.
El hospital expresó su pesar a través de un comunicado: "El equipo de trasplantes de Mass General está profundamente entristecido por el repentino fallecimiento del Sr. Rick Slayman", resaltando que Slayman será recordado como un farol de esperanza para innumerables pacientes trasplantados en todo el mundo.
La familia de Slayman destacó el impacto inspirador de su participación en este pionero procedimiento médico. "Rick se sometió a este procedimiento para brindar esperanza a las miles de personas que necesitan un trasplante para sobrevivir", compartieron en un comunicado, añadiendo que su legado inspirará a pacientes, investigadores y profesionales de la salud en todas partes.
Slayman había padecido diabetes tipo 2 e hipertensión durante años y sufría de enfermedad renal terminal al momento del trasplante. Anteriormente, había recibido un riñón de un donante humano en 2018, pero después de aproximadamente cinco años el órgano trasplantado comenzó a fallar, llevándolo de vuelta a la diálisis. Las complicaciones en el acceso vascular de diálisis fueron frecuentes y deterioraron significativamente su calidad de vida.
Este procedimiento de "uso compasivo" fue realizado bajo un Protocolo de Acceso Ampliado de la FDA, permitiendo el acceso a tratamientos experimentales cuando no existen otras opciones terapéuticas disponibles. La familia de Slayman ha pedido privacidad durante este tiempo de duelo mientras recuerdan a un ser querido que dejó una huella imborrable tanto en su comunidad como en el campo médico global.