Las liquidaciones del complejo agroexportador argentino cerraron abril con USD3.031 millones, un 9,2% más con relación a marzo, según la Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina (Ciara) y el Centro de Exportadores de Cereales (CEC).
De acuerdo con la entidad, esta cifra representa un récord para ese mes en los últimos siete años, mientras que el acumulado para el primer cuatrimestre fue de USD9.775 millones. Respecto del año anterior, la mejora en los precios internacionales de los granos disparó la facturación: los ingresos por exportaciones de este rubro alcanzaron los USD5.016 millones en el primer cuatrimestre del año pasado. Un dato a tener en cuenta es que este elevado nivel de despachos tiene como telón de fondo una caída de la producción sojera en la zona núcleo.
La entidad que nuclea a los exportadores destacó que el monto de abril representa un incremento de 9,29% con respecto a marzo.
En ese mes, la entrada de dólares del complejo agroindustrial llegó a 2.773 millones, lo que representó el mejor ingreso de los últimos 18 años para ese período y marcó un incremento de 53,2% con relación a febrero.
A la hora de buscar los motivos de esta suba, el principal factor radica en el aumento internacional de los precios de los subproductos del complejo de soja, trigo y maíz.
En Chicago, la soja se encamina hacia los USD580, mientras que aceite y harina cotizan a USD1.509 y a USD469,5 la tonelada, respectivamente.
En paralelo, el maíz escala posiciones y en breve superará la barrera de los USD300 por tonelada, con un trigo que también asciende en las cotizaciones.
La cosecha gruesa de la campaña 2020-2021 se realiza a buen ritmo, aunque una de las señales de alerta viene desde el río Paraná, que en estos días presenta un bajo nivel de caudal. El otro punto que la cadena de valor granaria sigue con atención es la caída en los rindes de soja. Según estimó la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), en la zona núcleo se registró la menor superficie sembrada de la última década, con una caída en la producción.
De acuerdo con la entidad bursátil, en esa región -clave para el volumen a nivel nacional de la oleaginosa- la cosecha de los lotes de primera está llegando a su fin, con rindes cercanos a los 3.500 kilos por hectárea, que bajan unos 300 kilos hacia el norte bonaerense.
Las buenas noticias llegan desde Córdoba, que se consolida como la provincia que aportará el mayor volumen, con rindes de hasta 3.900 kilos por hectárea.
Por el lado de la soja de segunda, el promedio es de 3.110 kilos por hectárea, por lo que el aporte de la región será de 14,5 millones de toneladas, un 19% menos que en la campaña anterior y una caída del 25% con respecto a la producción promedio de los últimos diez años en zona núcleo.
El maíz, si bien tuvo la mejor área de siembra de la última década al analizar los números de esta zona, fue castigado por la sequía, aunque no de manera tan severa como la soja. Con un rendimiento medio de 9.370 kilos por hectárea, desde la BCR calcularon que el cereal empatará con la oleaginosa en volumen cosechado y llegará también a sumar 14,5 millones de toneladas.
Fuente: Diario BAE