La Unión Industrial Argentina (UIA) propuso al Gobierno nacional y al Parlamento una serie de modificaciones al proyecto de Ley de Aporte Solidario, que incluye excluir de la base de imposición activos productivos y permitir dar por cumplido el aporte con un monto equivalente a inversiones productivas.
Así lo hizo al expresar que la Ley de Aporte Solidario "incrementa los problemas" que impiden la reactivación económica, y por su sesgo conceptual "descapitaliza a empresas que invierten, producen y sostienen el empleo", en un documento que fue elevado al Gobierno y el Parlamento.
El texto del trabajo alerta que "el proyecto no diferencia entre el patrimonio formado por capital productivo (empresas, máquinas y activos tecnológicos en el país) y aquél compuesto por activos financieros o inmuebles", en una descripción que denominan desde una "visión productivista".
Como resultado de esta medida "las empresas deberán destinar recursos afectados a la producción al pago de este aporte", al destacar que el tránsito en esta pandemia "combina aumentos de la carga impositiva, disminución de la inversión, caída del empleo y del consumo con el consecuente desplome de la recaudación".
Tras este análisis de los efectos que el empresariado considera afectará a la actividad productiva, la UIA propuso excluir de la base de imposición a las acciones o participaciones en activos productivos y permitir dar cumplimiento al monto de aporte requerido mediante un importe equivalente en inversiones productivas en el plazo de un año.
También plantea la posibilidad de incorporar las mismas exenciones que las que presenta el impuesto a los bienes personales, agregando la exención a Obligaciones Negociables de empresas argentinas para no afectar el ahorro en moneda nacional y en instrumentos públicos (que acaban de atravesar un proceso de renegociación)
Los industriales propusieron incorporar un mínimo no imponible y corregir las alícuotas para evitar tratamientos desiguales.
"El proyecto de ley del Aporte solidario y extraordinario para ayudar a morigerar los efectos de la pandemia" incrementa los problemas que impiden la reactivación económica, afectando profundamente al sector productivo", cuestionó el documento de la UIA.
En ese sentido, consideró que "el sesgo con el que se ha diseñado este proyecto descapitaliza a empresas que invierten, producen y sostienen el empleo en un contexto de emergencia social, sanitaria y económica".
En la actualidad, "el sector formal de la economía soporta el incremento de la carga impositiva a costa de una economía informal que le quita recursos al país. Argentina necesita revertir esta tendencia que afecta la capacidad de generar divisas y producción nacional, perdiendo cada vez más competitividad y espacio en los mercados externos", señaló.
Así, para la UIA, el sistema tributario "debe incentivar la reactivación económica, inversión y la generación de empleo", aunque enfatizó que "el proyecto en cuestión va en sentido contrario"
"La redacción del actual proyecto complejiza un marco ya muy adverso para las empresas argentinas: el número de empresas activas cae sistemáticamente desde hace 4 años, con 40.300 firmas menos en junio de 2020 respecto a junio de 2015. De ese total, 6.070 son industriales, esto es una caída de -11% en el período mencionado", agregaron los industriales.
Esto tiene su contrapartida en términos de empleo, "el cual tiene una caída acelerada desde mediados de 2018. En junio 2020 el número total de asalariados privados fue de 5,82 millones, esto es 290 mil menos que un año atrás y 435 mil menos que en el mismo mes de 2015", resaltaron.
Fuente: Telam