Este crecimiento ha sido consistente en los últimos cinco años, donde el incremento anual ha oscilado entre 2.0% y 2.2%, según informó Octavio Hernández, director general de la Asociación Mexicana de Productores de Leche (AMLAC), durante el Foro Global Agroalimentario.
Hernández destacó que la perspectiva para 2025 es similar, con un crecimiento proyectado entre 2.1% y 2.2%, lo que permitirá seguir cubriendo la demanda interna de leche. No obstante, alrededor del 25% del consumo de leche en México se cubre mediante importaciones, principalmente provenientes de Estados Unidos.
El tipo de cambio actual, con una cotización de 19.90 pesos por dólar, ha beneficiado a los productores locales, ya que mejora la competitividad de la leche mexicana en el mercado internacional, haciéndola más atractiva para los compradores extranjeros.
En cuanto a los precios al productor, se ha registrado un ligero aumento de entre 3% y 4%, pero la sequía sigue siendo uno de los mayores desafíos que enfrentan los ganaderos.
Para hacer frente a estos retos, la AMLAC ha iniciado diálogos con el secretario de Agricultura y Desarrollo Rural, Julio Berdegué, con el objetivo de impulsar la producción sostenible y la implementación de una Ley de Bienestar Animal que regule la operación de los productores bajo estándares de bienestar. Hernández subrayó que la producción con bienestar no solo mejora los volúmenes y la calidad de la leche, sino que también es clave para la competitividad en el mercado.
Finalmente, Hernández recordó que México produce actualmente entre el 74% y 75% de la leche que consume, lo que obliga al país a recurrir a importaciones para satisfacer la demanda interna.