La chicharrita, uno de los principales enemigos del cultivo de maíz, ha registrado un nuevo incremento en su presencia en diversas regiones de Argentina, según el 14° informe de la Red Nacional de Monitoreo de Dalbulus maidis. El análisis, realizado entre el 8 y el 23 de febrero de 2025, muestra que la plaga se ha extendido a la mayoría de las zonas productivas del país, aunque sigue siendo considerablemente menos agresiva que en el mismo periodo del año anterior.
En las regiones donde la plaga suele tener mayor presencia, como el NOA y el NEA, se ha observado un aumento en las localidades que capturan más de 50 adultos por trampa, con un incremento del 18% en el NOA, donde la mayoría de los maíces ya han superado su fase más vulnerable, encontrándose en estadios fenológicos avanzados. A pesar de esto, el NEA se mantiene como la zona de mayor preocupación debido a que el 23% de las localidades relevadas presentan cultivos en estadios vegetativos tempranos, es decir, aún susceptibles a la plaga. Los expertos resaltan la importancia de seguir monitoreando, especialmente en los lotes de siembras tardías.
Por otro lado, en el Litoral, aunque se reporta un incremento en la presencia de la chicharrita, los maíces tempranos ya se encuentran en fases reproductivas avanzadas, lo que reduce la vulnerabilidad. La región del Centro Norte también muestra un aumento en la presencia de la plaga, pero la mayoría de los cultivos está fuera del período de susceptibilidad. La única zona sin cambios significativos es el Centro-Sur, donde más del 96% de las localidades siguen sin registrar la plaga.
El informe resalta que, aunque la mayoría de los cultivos ya han superado la etapa crítica, el monitoreo constante es esencial para entender la dinámica de la plaga y poder aplicar estrategias efectivas de manejo. Alejandro Vera, coordinador de la Red, concluyó: "Aunque los maíces estén fuera de peligro con la chicharrita, hay que seguir monitoreando para desarrollar estrategias de manejo más efectivas".