Investigadores de Georgia, EE.UU., liderados por el profesor Prashant Doshi de la Universidad de Georgia, están a la vanguardia de la tecnología agrícola con el desarrollo de un brazo robótico capaz de clasificar cebollas Vidalia frescas. Este sistema robótico utiliza inteligencia artificial (IA) y visión por computadora para diferenciar entre cebollas perfectas y aquellas con imperfecciones, un avance significativo para las granjas que enfrentaron escasez de mano de obra durante la pandemia.
El proyecto, en colaboración con el Centro de Investigación de Cebollas y Vegetales Vidalia y A&M Farms, ha hecho progresos notables en la tarea de 'pick-inspect-place', donde no solo selecciona y coloca los productos, sino que también los inspecciona utilizando un sistema de IA. El brazo robótico, equipado con cámaras, ha sido entrenado para identificar imperfecciones en las cebollas, retirando aquellas no aptas para la venta.
Impacto y Potencial Futuro de la Tecnología
El uso de este brazo robótico no solo pretende aumentar la eficiencia en los cobertizos de empaque sino también ofrecer una alternativa sostenible a la mano de obra humana, la cual puede ser monótona y extenuante. Según Prasanth Suresh, estudiante de doctorado involucrado en el proyecto, el sistema se basa en dos modelos de IA: uno que guía el comportamiento del robot y otro que detecta y clasifica las cebollas. Esta tecnología no solo es aplicable a las cebollas sino que podría expandirse para clasificar otras frutas y verduras.
El profesor Doshi enfatiza que el objetivo de integrar la IA en la agricultura no es reemplazar a los trabajadores humanos, sino proporcionar alternativas que alivien la carga laboral, especialmente en condiciones difíciles. Además, este tipo de innovaciones podría proteger y preservar empleos al mitigar los efectos de la escasez de mano de obra y mejorar las condiciones laborales.
Este desarrollo representa un paso significativo hacia la automatización de la agricultura, prometiendo no solo mejorar la eficiencia y precisión en el procesamiento de alimentos sino también fomentar un entorno de trabajo más sostenible y menos arduo para los trabajadores agrícolas.