El último mes de julio ha sido especialmente complicado para las empresas exportadoras de granos y subproductos en Argentina. La Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina (CIARA) y el Centro de Exportadores de Cereales (CEC), entidades que representan el 48% de las exportaciones del país, anunciaron una baja significativa en la liquidación de divisas por parte del sector.
Durante el mes de julio, las empresas del sector solo lograron liquidar la suma de U$S 1.925 millones, lo que representa una caída del 39.2% en comparación con el mismo mes del año pasado. Además, aunque el monto es un 21.8% superior al de junio de 2023, sigue siendo una cifra preocupante para el sector.
Liquidación por exportaciones de granos y subproductos
Fuente: CIARA-CEC
Esta disminución en los ingresos se atribuye en gran medida a la sequía que afectó gravemente la cosecha gruesa. El inicio del "dólar soja" mediante el Decreto 378/23 también tuvo un impacto significativo en el sector, junto con la situación económica general del país.
El ingreso de divisas del sector cerealero-oleaginoso durante los primeros siete meses del año muestra una pérdida del 42% en comparación con el mismo período del año pasado. La falta de producción agrícola debido a la sequía ha afectado gravemente la capacidad de las empresas para generar ingresos a través de las exportaciones.
Las agroexportadoras explican que el ingreso mensual de divisas, que se transforman en pesos, es crucial para mantener la compra de granos a los productores al mejor precio posible. Esta liquidación de divisas está directamente relacionada con la adquisición de granos que serán exportados, ya sea en su estado natural o procesados como productos industriales.
Es importante destacar que la anticipación en la liquidación de divisas es un elemento clave en este sector. Por lo general, la mayor parte del ingreso de divisas se produce con bastante antelación a la exportación, con períodos de anticipación que varían según el tipo de grano y la etapa de la campaña. Aun así, este proceso no ha sido suficiente para evitar las pérdidas significativas en los ingresos del sector.
El complejo oleaginoso-cerealero, que también incluye al biodiésel y sus derivados, ha sido un importante motor de las exportaciones de Argentina, representando el 48% del total de las exportaciones del país el año pasado, según datos del INDEC.
En cuanto a los productos más exportados del país, la harina de soja encabezó la lista, representando el 14.2% del total. El maíz ocupó el segundo lugar, con el 11%, seguido por el aceite de soja, que representó el 6.9% de las exportaciones.
En resumen, la sequía y otros factores económicos han generado una disminución significativa en los ingresos de las empresas exportadoras de granos y subproductos en Argentina. El impacto de esta situación se ha sentido de manera considerable en el sector agrícola y en la economía del país en general.