Los precios de los granos en Chicago siguen reflejando la incertidumbre de la guerra comercial que mantiene en vilo a los mercados. Mientras que el trigo y el maíz lograron repuntar tras anuncios conciliadores entre Estados Unidos y México, la soja enfrenta una mayor presión por las medidas de China, aunque con una leve recuperación en las últimas ruedas.
Según la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), la reactivación del trigo y el maíz se debe a la actitud moderada del presidente Donald Trump, quien en su red social Truth afirmó que eximiría del arancel del 25% a los productos mexicanos que cumplan con el tratado de libre comercio. Este anuncio fue respaldado por la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, generando alivio en los mercados.
El trigo ha sido uno de los commodities más afectados por la volatilidad de las últimas semanas. Si bien la incertidumbre climática en Rusia y EE.UU. ha sido un factor clave, ahora se suman preocupaciones por la producción en la Unión Europea, donde los cultivos muestran condiciones similares a las de la última mala campaña.
A pesar de estos desafíos, el trigo recuperó un 3% en los últimos días. Este rebote se debe en parte a la debilidad del dólar, que mejora la competitividad del cereal estadounidense en los mercados internacionales.
México es el principal destino del maíz estadounidense, ya sea en forma directa o a través de proteína animal. La decisión de Trump de eximir del arancel a productos agrícolas mexicanos trajo alivio a los operadores en Chicago, que han visto cómo la demanda externa del maíz norteamericano se mantiene firme.
En las últimas dos ruedas, el futuro de maíz recuperó 5 USD/t, logrando revertir parte de la abrupta caída sufrida desde finales de febrero.
A diferencia de México, el conflicto entre EE.UU. y China sigue sin avances. Pekín respondió con un incremento en los aranceles a la soja estadounidense, en respuesta a la duplicación de gravámenes impuesta por Washington.
Sin embargo, la soja norteamericana no siente todavía un gran impacto, ya que la presión de oferta en esta época del año proviene de Sudamérica, particularmente de Brasil. Esto le permite a China contar con una fuente alternativa de abastecimiento, limitando el efecto inmediato de la disputa comercial.
A pesar del contexto adverso, la soja subió 6 USD/t en la última jornada y acumula una recuperación del 3% en las dos últimas ruedas.
El mercado sigue atento a los próximos movimientos en la guerra comercial. Si bien la debilidad del dólar y la exención de aranceles a México han dado un respiro a los granos, la falta de avances con China mantiene la incertidumbre en torno a la soja.
En las próximas semanas, los operadores seguirán de cerca la evolución de las negociaciones y las decisiones de los gobiernos involucrados, con la expectativa de que las condiciones del mercado se estabilicen.