Con refuerzo de los protocolos de bioseguridad se busca evitar la baja en el abastecimiento.
La gripe aviar sigue golpeando y poniendo en jaque a toda la cadena agroindustrial, y en especial a la producción de pollos en el país. En las últimas horas del pasado viernes se detectó y notificó el primer caso positivo en una granja comercial ubicada en General Racedo, Entre Ríos, la principal provincia argentina que produce esta proteína alimenticia.
El caso fue confirmado por el Servicio Nacional de Sanidad Agroalimentaria (SENASA), ente de control y fiscalización de productos, y puso inmediatamente en alerta a toda la cadena productora. En ese sentido, inmediatamente se buscó reforzar los protocolos de bioseguridad implementados desde el 15 de febrero pasado, cuando fue declarada la emergencia sanitaria en todo el país.
Lo cierto es que en Argentina el consumo de carne de pollo se encuentra en pareja competencia con la carne vacuna, sin embargo el aumento de nuevos casos podría provocar un recrudecimiento de la emergencia sanitaria por gripe aviar que tenga impacto directo sobre la oferta del producto en el mercado.
Finalizaron los trabajos de exterminio en la granja infectada
Tras el brote de gripe aviar en la granja comercial de Entre Ríos, SENASA puso en práctica el protocolo de rutina y realizó trabajos para garantizar la contención del brote, entre ellos la aplicación del rifle sanitario.
En ese marco de control del brote los agentes sanitarios decidieron aplicar la medida extrema del denominado "rifle sanitario", para evitar la dispersión del virus. Para contener el brote y asegurar tenerlo bajo control, las autoridades sanitarias aplicaron el "stamping out" o rifle sanitario a todos los animales afectados. De este modo, se les da muerte y entierro bajo estrictas normas de bioseguridad, a todos los animales infectados o que hayan tenido contacto con algún caso positivo.
Los trabajos se realizaron en la granja de la familia Becker, ubicada sobre el camino que une Puiggari con Racedo, ciudad donde fue detectado el primer caso positivo y el siguiente brote de gripe aviar en 15.000 gallinas de postura y 5.000 pollas en recría.
La medida extrema busca asegurar la contención del virus en el lugar donde fue detectado el brote. Si bien no se confirmó cual fue la técnica de exterminio aplicada, se conoce que la modalidad que habitualmente escoge el Senasa para el sacrificio de animales infectados es mediante el uso de monóxido de carbono . Por lo cual, este sería el método autorizado por el ente sanitario, más empático con los animales: se busca que las aves tan solo se queden dormidas para evitarles un sufrimiento mayor.
Limpieza del lugar y sepultado del guano
Entre las tareas de contención también se llevó a cabo la limpieza minuciosa de la granja y bajo riguroso control y normas de seguridad. De hecho, únicamente el personal de SENASA y los trabajadores especializados en la limpieza de galpones, fueron quienes tuvieron acceso al establecimiento afectado. Entre las tareas que realizaron, estuvo el sepultado del guano (sustrato fertilizante derivado de la acumulación de excrementos), en zanjas con una determinada profundidad.
A su vez, las aves que serán sacrificadas se tapan con tierra. Lo habitual es que el sacrificio sea del total de aves que existen en el lugar afectado por el brote.
La autoridad provincial
Por su parte, el ministro de Economía de Entre Ríos, Hugo Ballay, señaló que la industria avícola es uno de los motores de la economía local. "Desde el Gobierno provincial estamos al lado de nuestros productores para brindarles seguridad, confianza y garantías", agregó. Por ello avaló la aplicación del procedimiento de rutina para casos de contagio positivo de la enfermedad.
Al ser consultado sobre el primer caso detectado en la provincia y confirmado por el Senasa, confirmó la aplicación de los "los protocolos sanitarios que establecen los acuerdos internacionales en la materia". "Entre Ríos tiene en la avicultura uno de sus motores económicos y se reforzarán todas las acciones de coordinación, cumplimentado los procedimientos sanitarios establecidos por el SENASA, que es el organismo rector en la sanidad animal en Argentina, puntualizó Ballay.
Se abrió el debate en medio de la crisis sanitaria
La realidad es que ya pasaron 100 días desde la voluntaria declaración de emergencia sanitaria por el brote de gripe aviar en Argentina, y en este contexto se abrió el debate en el seno mismo de la cadena agroindustrial : ¿Es oportuno vacunar a millones de aves en riesgo?
De este modo, dos posturas contrarias se enfrentan. Por un lado, la Cámara Argentina de Productores Avícolas (CAPIA), que agrupa a los productores de huevos están a favor de la vacunación masiva y así lo solicitaron. Por otra parte, el Centro de Empresas Procesadoras Avícolas (CEPA), que nuclea al sector productor de pollos, se niega a aplicar la medida de vacunación en masa alegando que ello tendría un directo impacto en las exportaciones.
El mapa de los brotes
Por el momento, se registran 528 notificaciones de casos detectados y notificados. De ellos, fueron confirmados 98 en todo el país, la mayoría en animales silvestres y de traspatio, y 17 de producción comercial. Cabe destacar, que de los 98 casos detecciones y confirmados como positivos de enfermedad en todo el país, 72 son brotes cerrados, es decir que ya no tienen la enfermedad, lo que representa el 73,4 % del total.
Dentro del mapa de la dispersión de la enfermedad, fue detectada en 17 provincias afectando el abastecimiento en el mercado y el precio de venta del pollo. En ese orden, en las últimas semanas se decidió la venta de animales más chicos, para ponerlos afuera de las granjas lo antes posible, lo que provocó una caída en la oferta.
