Estas medidas buscan mejorar la competitividad y fomentar el crecimiento de un sector que representa el 10% de la producción industrial del país y sostiene más de 75,000 empleos.
La reducción arancelaria afectará especialmente a los proveedores de autopartes, quienes podrán vender sus productos a las terminales con menores costos, promoviendo a su vez una reducción en el precio de las autopartes nacionales destinadas a la exportación. Asimismo, se anunció la reducción de los aranceles para moldes de metal, que pasarán del 35% al 12.6%, y para moldes de inyección plástica, que también verán una disminución al 12.6%.
Además, a partir de junio, se implementará la homologación de ensayos de licencias para la configuración de modelos con Brasil, evitando la duplicación de ensayos ya aprobados por países vecinos, lo cual simplificará y abaratará los procesos de producción y certificación.
Estas iniciativas forman parte de un esfuerzo más amplio por parte del Gobierno para modernizar y digitalizar procesos, incluyendo la sistematización y digitalización del régimen de Reposición de Existencias (Repostock), mejorando así la eficiencia operativa del sector automotriz en el mercado internacional.
