El Mercosur, la principal región exportadora de carne bovina, se estima que volcará al mercado internacional el equivalente a 4,11 millones de toneladas peso carcasa en 2021, unas 100 mil toneladas menos (-2,4%) que en 2020.
La contracción se da por la expectativa de una disminución de la producción de carne en Brasil, parcialmente compensada por un aumento previsto en los volúmenes de producción y de exportaciones de los dos socios menores del bloque, Uruguay y Paraguay.
Brasil atraviesa por una intensa fase de recomposición de existencias que, por el momento, no muestra señales de aflojar. Los precios de los terneros han subido más que los de los animales terminados, lo que alienta a mantener los vientres en el rodeo de cría, reduciendo la producción.
Por lo tanto, la faena en frigoríficos con algún tipo de inspección (federal, estadual o municipal) se estima en baja de 6%. A su vez, por el momento las proyecciones dan cuenta de un aumento del PBI en Brasil de 3,0-3,5%, lo que alentaría un crecimiento de la demanda doméstica por carne vacuna, dejando un saldo de exportación de unos 2,3 millones de toneladas carcasa, 9% menos que en 2020. Si la expansión de la economía es menor, el mercado interno demandará menos producto y quedará un mayor volumen para la exportación.
En el caso de Argentina la expectativa es de un descenso de la faena de 4% y de una caída de similar proporción del consumo doméstico, por lo que las exportaciones -si no se restringen por decisiones políticas- se proyectan similares a las del año pasado.
Por su parte, la producción y el saldo exportable de Uruguay y Paraguay se proyectan al alza. Para Uruguay las exportaciones alcanzarían 470 mil toneladas carcasa (+13% anual) y para Paraguay 440 mil toneladas (+15%).