El eucalipto, uno de los géneros más cultivados en Argentina, es clave para satisfacer la creciente demanda global de productos madereros, destacándose por su rápido crecimiento y adaptabilidad a suelos marginales. En este contexto, el mejoramiento genético tiene un papel fundamental en la optimización de la producción forestal.
El equipo de investigación del INTA ha evaluado diferentes clones, como Eucalyptus grandis (EG) y Eucalyptus grandis x Eucalyptus camaldulensis (GC), analizando tanto su desempeño en el campo como sus propiedades en laboratorio. Los resultados obtenidos revelaron que algunos clones tienen un gran potencial para aplicaciones bioenergéticas, mientras que otros son más aptos para usos estructurales.
Entre los hallazgos más relevantes, el clon EG INTA 157 destacó por su forma de fuste y menor conicidad, mientras que el EG INTA 36 y EG INTA 157 mostraron una mayor proporción de duramen, lo que mejora su comportamiento en ciertos procesos industriales. Por su parte, los clones GC presentaron mayores valores de densidad básica, lo que indica una mayor resistencia en comparación con los clones EG. Además, el análisis de las tablas aserradas mostró que los clones GC INTA 24 y EG INTA 157 presentan características óptimas para la industria forestal, con menores pérdidas por rajado y defectos.
Este estudio, realizado en colaboración con productores e industriales, busca fomentar una producción forestal más eficiente y sostenible, promoviendo el uso de clones de eucalipto con mayor capacidad de adaptación a las exigencias del mercado global.