La clave está en los controles tempranos y el uso de herramientas como Biokato, un bioinsecticida que no solo combate la plaga, sino que también fortalece las plantas.
Son más de 400 las localidades de Argentina y algunas de Uruguay en los que está actuando la Red Nacional de Monitoreo de Dalbulus maidis, una agrupación conformada por diversas entidades técnicas relacionadas con el campo y que releva de manera quincenal el estado de situación con relación a la chicharrita del maíz, a través del uso de trampas cromáticas adhesivas.
En los últimos días, se publicó el 11° informe de la Red y los resultados no difirieron demasiado de lo que han venido mostrando los reportes anteriores: en la mayoría de la superficie maicera argentina, la plaga sigue ausente o se detecta en poblaciones muy bajas, que no configuran un gran riesgo, al menos por ahora.
De todos modos, en algunas zonas endémicas viene creciendo su presencia y desde la Red advirtieron un factor clave: "Hay situaciones claramente diferentes entre las localidades endémicas, relacionadas con si se realizaron o no prácticas de manejo". Concretamente, los monitoreos y controles realizados de manera oportuna marcan la diferencia.
En ese sentido, desde la Red invitaron a mantenerse activos en la vigilancia de la plaga porque "ante el aumento de las condiciones ambientales predisponentes en esta época del año, los expertos recomiendan intensificar los monitoreos a medida que avanza la siembra de maíces tardíos, y, en caso de ser necesario, aplicar estrategias de control químico para contener el crecimiento de la plaga y mitigar posibles daños".
Un bioinsecticida para frenar a la chicharrita
En esta estrategia coincide Tomás Toraglio, Coordinador de Desarrollo de Biotrop. "En estas últimas semanas ha empezado a aparecer chicharrita en distintas zonas. Lo primero que escuché fue Formosa, donde ya hicieron aplicaciones para frenarla, pero también en Chaco, Santiago del Estero, Salta y el norte y centro de Córdoba", reveló Toraglio.
Como es un insecto que no produce daño por sí mismo sino al ser vector del complejo de enfermedades que causan el achaparramiento del maíz, el representante de Biotrop recordó que los umbrales de aplicación son bajos.
Concretamente, la sugerencia es pulverizar con 0,2 o 0,3 chicharritas por planta (un insecto cada tres o cada cinco plantas, aproximadamente); es decir, hacer controles bien tempranos, sin esperar a que crezcan las poblaciones.
En este marco, la recomendación de Biotrop es el uso de Biokato, el bioinsecticida que el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) aprobó en julio del año pasado para el control de la chicharrita.
Se trata de un producto que se destaca por su innovadora composición, que incluye dos cepas: Pseudomonas fluorescens y Pseudomonas chlororaphis; y que a su vez están acompañadas por la exclusiva tecnología D.O.P (Delivering Outstanding Performance), que induce a las bacterias a producir fitohormonas para un control más efectivo.
Según Toraglio, entre sus beneficios se encuentra que tiene una persistencia de hasta siete días y un alto poder de volteo, además de que ataca a la chicharrita por tres frentes: por contacto, por ingestión o por absorción tarsal (a través de las patas).
"El producto debe aplicarse en una dosis de un litro por hectárea. Si a partir del monitoreo surgen umbrales que superan a una chicharrita por planta, es recomendable mezclarlo con algún piretroide, ya que tiene compatibilidad", explicó el ejecutivo de Biotrop.
También destacó que es un insecticida biológico selectivo para insectos benéficos, como los parasitoides de huevos que ayudan a mantener bajas las poblaciones de Dalbulus maidis.
Por otro lado, Toraglio recordó asimismo que, al contar con fitohormonas, Biokato ofrece un plus de bioestimulación que mejora las defensas de la planta frente a la posibilidad de sufrir achaparrramiento del maíz. "Eso es una diferencia muy importante versus un químico", resumió.
En conclusión, desde Biotrop destacan cinco claves que hacen de este producto una apuesta segura:
Excelente control: alta eficiencia contra la chicharrita de maíz, tanto en adultos como en ninfas de Dalbulus maidisPromueve el equilibrio biológico del sistema: no afecta a los insectos benéficos que complementan el control de la plaga.Bioestimulación: cuenta con poder bioestimulador de procesos biológicos deseables.Acción prolongada y residual: proporciona un control duradero en el cultivo.Alta compatibilidad: fácil de combinar con otros métodos de control.