A través de un "mapa de la sequía" en la Argentina especialistas afirmaron que, por el fenómeno climático, están bajo riesgo unas 2 millones de hectáreas de cultivos y casi 15 millones de cabezas de ganado bovino. En tal sentido, a estos números arribaron en base a datos relevados hasta el pasado 11 de febrero que permitieron establecer cuáles fueron hasta ahora las zonas más afectadas por la ausencia de lluvias en el país durante este verano.
El trabajo es fruto de una sinergia interinstitucional y fue realizado por el Ministerio de Agricultura, el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), la Faculta de Agronomía de la UBA, el Instituto Nacional de Agua, el Servicio Meteorológico y la Conae.
El informe señala que "las condiciones de sequía empeoraron severamente durante el mes de enero, principalmente en el noreste del país". Y que "una combinación de inusual falta de lluvias y temperaturas récord género una situación extrema en provincias como Corrientes, Misiones, norte de Entre Ríos, y este de Chaco y Formosa".
En detalle, el reporte oficial establece que el área considerada en situación de sequía equivale a unas 112 millones de hectáreas, dentro de las cuales hay 1 millón de habitantes.
En materia ganadera subsisten allí 14,7 millones de cabezas de ganado sobre un stock bovino total de 53 millones. A la vez que se han relevado 1,9 millones de hectáreas de cultivo que han sufrido daños severos, de las cuales son de soja de primera unas 700.560 hectáreas, de soja de segunda 508.152 hectáreas, de maíz 694.851 hectáreas, y de girasol unas 12.851 hectáreas.
En lo que respecta al régimen de precipitaciones, el informe consigna que durante el primer mes del año, "se observaron déficits de lluvias muy fuertes en el noreste del país que se combinaron con temperaturas máximas extremas que ocurrieron en todo el país".
Pero específicamente, las provincias más afectadas por la ola calor fueron Corrientes, Chaco, Formosa y Misiones. "Esto generó un empeoramiento de la situación en esta región y una intensificación de las condiciones de sequía", señalan los técnicos. Gran parte de esa zona del país, está actualmente sufriendo devastadores incendios.
Todo lo contrario, sucedió en la región central, la Patagonia, el norte de Cuyo y NOA, donde se registraron importantes precipitaciones que permitieron aliviar la problemática.
