Estados Unidos se prepara para anunciar nuevas sanciones contra Rusia por la invasión a Ucrania, que incluyen un embargo a las importaciones del crudo ruso, según confirma NBC News.
El presidente Joe Biden hablará este martes y se espera que anuncie nuevas medidas contra el gobierno del presidente Vladimir Putin por la guerra en Ucrania, que incluirá la prohibición de importaciones de crudo ruso.
La nueva medida ajustaría aún más la economía rusa ya sacudida por otras sanciones, no solo de Estados Unidos, sino de otros países. También significaría un aumento en el precio del crudo y por consecuencia, de la gasolina.
Estados Unidos y sus aliados europeos han intensificado las sanciones para que Rusia pague por invadir a Ucrania, y a pesar de que los castigos afectan a la economía rusa, hasta ahora no han conseguido detener los combates.
La Casa Blanca anunció la semana pasada una nueva ronda de sanciones financieras dirigidas a personas del círculo más cercano al presidente Vladimir Putin, y el Departamento de Estado dio a conocer prohibiciones de viaje a 19 oligarcas rusos, a sus familiares y allegados.
Días atrás, la Casa Blanca anunció nuevas sanciones contra Rusia y su aliado, Bielorrusia, incluyendo controles de exportación dirigidos a las refinerías de petróleo rusas.
Estados Unidos se unió a Europa y Canadá para vetar su espacio aéreo a las aerolíneas rusas, y el Departamento de Justicia anunció una nueva iniciativa para perseguir a los oligarcas rusos.
El gigante energético Shell dejará de comprar petróleo y gas natural ruso, además de cerrar sus estaciones de servicio y otras operaciones en el país, según anunció el martes en medio de presiones internacionales para que las compañías corten sus lazos con Moscú debido a la invasión de Ucrania.
Shell indicó en un comunicado el martes que dejaría de operar con todos los hidrocarburos rusos, incluidos crudo, derivados del petróleo, gas natural y gas natural licuado, " de forma gradual".
La decisión se tomó en medio de subidas en el precio del crudo que han remecido los mercados globales.
El ministro ucraniano de Exteriores criticó hace unos días a Shell por seguir comprando petróleo ruso, y arremetió contra la compañía por seguir haciendo negocios con el gobierno del presidente Vladimir Putin.