Los empresarios aceiteros se quejaron hoy de la intransigencia del sindicato del sector que mantiene un cese de actividades por tiempo indeterminado y reclaman que se inicie una mesa de diálogo.
"Entramos en el cuarto día de paro y los sindicatos siguen sin atender. La industria aceitera se lamenta profundamente la falta de diálogo y voluntad real de llegar a un acuerdo. Es menester levantar la medida de fuerza para retornar a la mesa de negociación", señalaron desde CIARA-CEC, la cámaras que agrupan a los empresarios.
En un parte de prensa, indicaron que "esta falta de vocación gremial le sigue descontando ingresos a miles de trabajadores aceiteros, que se sorprenderán al ver menguados sus ingresos a fin de este mes".
"A los transportistas les decimos lo mismo, y es que hay un solo responsable para los males que sufrirán sus familias este mes: los líderes sindicales, que tomaron medidas de fuerza intempestivas, sabiendo que nadie podía evitar que colapsen las rutas y las terminales", insistieron desde las cámaras.
CIARA-CEC aseguró que "el daño económico a miles de transportistas y vecinos es absolutamente mayor a cualquier pretensión salarial real".
"La industria insiste con una oferta de aumento supera la expectativa inflacionaria de los próximos meses: 12% a julio y 5% a septiembre, que acumulan 94% sobre una inflación proyectada menor", subrayaron.
En consecuencia reiteraron "el pedido de que se levante la medida ahora y que los líderes sindicales vuelvan a la mesa de negociación para retomar el trabajo normal".
La medida de fuerza, que empezó el martes, se profundiza frente al distanciamiento de las posiciones entre los representantes de los trabajadores y las empresas, afectando a la actividad en todas las plantas del país y la liquidación de divisas del sector agroexportador.
El Secretario General del Sindicato Aceitero y paritario en la negociación salarial, Marco Pozzi, precisó ayer que "la discusión del sueldo viene desde hace un mes", detallando que "pedimos $1.550.000 de salario mínimo y vital para cubrir las necesidades a partir de julio", mientras que "las empresas vinieron con una propuesta después de 3 reuniones que realmente era muy baja y no llegaba a $1.400.000".
Pozzi rechazó que el sector esté en crisis y afirmó que "las empresas son las grandes ganadoras de este modelo, no los trabajadores", remarcando que "nuestro salario representa menos del 1,5% de la ganancia de las empresas".
En este sentido, indicó que "no es que hubo reducción" de la actividad sino que "es un freno por la especulación, no por falta de trabajo o materia prima" e insistió en que "no hay crisis dentro del sector", manifestando que las industrias "lo que buscan es una mejora en término de divisas".
En cuanto a la restitución de la cuarta categoría del Impuesto a las Ganancias, el gremialista advirtió que "Ganancias tiene un alto impacto dentro de nuestro sector, hay un 80% que lo pagará", aunque aclaró que "esa será una pelea que daremos en otro momento, ahora estamos con la lucha de las paritarias".