Entre estos decretos, destaca uno que establece incentivos tributarios para la importación de bienes de capital y plantas industriales, dirigidos específicamente a sectores claves como el agropecuario, industrial, construcción y minería. Este esfuerzo forma parte de una política del Gobierno nacional para fomentar la productividad y acumulación de capital en el sector agropecuario, como lo resalta el ministro de Economía y Finanzas Públicas, Marcelo Montenegro??.
Además, los productores bolivianos, especialmente en la región de Santa Cruz, se enfocan en el acceso a la biotecnología como objetivo principal para 2024. La expectativa es que la biotecnología pueda consolidarse en Bolivia para aumentar la producción en cultivos como la soja y el maíz. José Luis Farah, presidente de la Cámara Agropecuaria del Oriente (CAO), informó que las mesas técnicas con el Ministerio de Desarrollo Rural y Tierras (MDRyT), suspendidas en noviembre de 2023, podrían reanudarse a principios de enero para avanzar en este proyecto??.
Farah también presentó el informe anual del 2023, donde destacó un crecimiento del 13% en el sistema agrícola y un 5% en el sector agropecuario. Para 2024, se proyecta la siembra urgente de 3 millones de hectáreas destinadas a cultivos, sujeta a las condiciones climáticas en las zonas productivas de Santa Cruz. La provisión oportuna de diesel es otro factor crucial para completar las labores agronómicas en el campo.
Estas iniciativas y proyecciones indican un enfoque claro del gobierno y las autoridades agrícolas bolivianas para fortalecer y expandir el sector agropecuario, promoviendo la modernización y la aplicación de nuevas tecnologías como la biotecnología.