Desde hace rato se viene especulando con la posibilidad de que se vuelva a producir en serie uno de los autos más icónicos del cine, el DeLorean DMC-12, que hizo de máquina del tiempo en Volver al Futuro .
Luego de un tiempo sin avances, ahora la compañía parece haber encontrado la manera de hacer revivir este clásico y lo hará en modo 100% eléctrico.
La clave está en que la La Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en Rutas (NHTSA, por sus siglas en inglés) aprobó una nueva regulación que permite a pequeños fabricantes de bajo volumen producir y comercializar réplicas similares a automóviles producidos hace 25 años.
Se trata de una medida similar a la que existe en la Argentina con la Ley de Autos Artesanales, que también habilita a talleres chicos, fabricar réplicas y hasta modelos originales , siempre con bajos volúmenes de producción.
La propia DeLorean Motor Company resaltó en su blog la decisión de la NHTSA y detalló que llevan años esperando esta oportunidad y es ahora cuando aparece el momento propicio para volver a producir y vender al resucitado DeLorean DMC-12.
Y la normativa parece haber llegado a pedir de la empresa, ya que este año el modelo va a estar cumpliendo 40 años.
El DMC-12 fue un auto que se gestó por el ambicioso proyecto del fundador de la compañía, John DeLorean, un extrovertido ejecutivo, con ínfulas de estrella de rock de los años 70, que terminó sucumbiendo por casos de estafas mezcladas con historias de narcotráfico .
Del desarrollo del modelo habían participado ni más ni menos que Colin Chapman, fundador de Lotus, que se encargó del chasis y la suspensión, y Giorgetto Giugiaro, que le dio forma al vanguardista diseño con apertura de puertas tipo alas de gaviota.
Y a pesar de la popularidad que recibió por su participación en la película en la que Marty McFly viajaba en el tiempo, el auto terminó en un verdadero fracaso.
Nuevo intento
El anuncio original del regreso a la producción del sueño de John DeLorean se había producido hace 5 años. En aquel momento, incluso hasta se podía hacer una reserva, pero la normativa no llegó a tiempo.
No quiere decir que con la aprobación de esta legislación todo el terreno esté allanado. DMC aclara que por la pandemia de coronavirus varios de los proveedores que tenían como socios en el proyecto tuvieron que bajar las persianas o fueron absorbidos por grandes empresas, que dejarían afuera la producción de componentes para coches de volumen pequeño.
Otro aspecto clave es la financiación para la producción del DMC-12, que por ahora sigue sin una confirmación al 100%. Pero esta nueva reglamentación abre una puerta que hasta el momento no tenía.
El nuevo modelo apunta a ser completamente eléctrico pero conservando los rasgos inconfundibles del original, que conservará incluso su carrocería de acero inoxidable.
DMC había presentado un prototipo en 2012 de lo que sería el resucitado modelo y en 2016 abrió las reservas para el vehículo que tenía previsto llevar un motor de combustión, cuyas primeras unidades iban a ser entregas en 2017.
Pero el motor que se había pensado utilizar iba a dejar de cumplir con el nivel de emisiones permitidas en 2022. Es por eso que la única salida posible para revivir el DMC-12 era hacerlo 100% eléctrico.