La entidad del campo ha señalado que los productores están enfrentando serias dificultades debido a la falta de estos insumos. La industria de fertilizantes ha confirmado que hay una reducción del 20% en el volumen disponible para la importación comparado con el año pasado. Este déficit es especialmente preocupante dado que no quedan productos nitrogenados en el mercado doméstico para la siembra de maíz, y aunque hay algunos productos fosfatados disponibles, su escasez ha elevado los precios.
Impacto en la Producción Eddy Fay, consultor del sector de fertilizantes, ha indicado que hay cerca de 200.000 toneladas de fertilizantes en espera de aprobación para su importación. La situación se agrava por el hecho de que las mercancías que faltan aún no han llegado al campo, y la liberación de importaciones, aunque ha mejorado en los últimos días, viene de un mes de atraso.
Consecuencias Económicas La escasez de estos insumos no solo afecta la producción agrícola, sino que también impacta en la cantidad de divisas que el país podría recibir por las exportaciones. Los productores están presionando para que se tomen soluciones y determinaciones que aseguren el aprovisionamiento normal de estos insumos esenciales.
Ritmo Lento en Aprobaciones de Importaciones La industria ha reportado a Agrolatam que las aprobaciones de las importaciones tanto de fertilizantes como de fitosanitarios se están dando a un ritmo muy lento. Además, ha habido dificultades para pagar a los proveedores del exterior. Esto ha generado una expectativa de definiciones por parte del próximo gobierno.
Problemas con el Abastecimiento de Gasoil Pablo Ginestet, coordinador de la Comisión de Agricultura de CRA, ha explicado que aunque los distribuidores están proporcionando gasoil por cupos, este ritmo está afectando toda la logística e incrementando los costos productivos. Los productores se ven obligados a adaptarse a esta limitación, lo que genera una preocupación constante sobre posibles faltantes.
La actual campaña agrícola en Argentina se encuentra en un punto crítico debido a la baja disponibilidad de insumos clave como fertilizantes y gasoil. Esta situación representa un desafío significativo para los productores, quienes buscan maximizar el rendimiento de los cultivos de maíz y soja en un contexto de buenas condiciones climáticas. La industria y los productores esperan acciones concretas para resolver estos problemas y asegurar una campaña agrícola exitosa.