Con la toma de posesión del presidente electo Donald Trump, prevista para el 20 de enero, los trabajadores agrícolas inmigrantes en Estados Unidos enfrentan una creciente ansiedad ante las posibles deportaciones masivas prometidas durante la campaña. Esta situación podría tener un impacto profundo en el sector agrícola, altamente dependiente de esta mano de obra.
Preparativos legales y estrategias comunitarias
Organizaciones de apoyo a trabajadores agrícolas reportan un aumento exponencial en la demanda de servicios legales y talleres de preparación. Estas capacitaciones incluyen simulaciones de interacciones con agentes de inmigración, documentación para designar tutores para hijos en caso de detención y estrategias para garantizar el acceso a salarios.
Patricia Ortiz, directora legal de California Rural Legal Assistance, destacó que la ubicación rural de muchos trabajadores dificulta el acceso a servicios legales, dejándolos en una posición aún más vulnerable.
Impacto potencial en la producción agrícola
El sector agrícola estadounidense, especialmente en California, depende enormemente de trabajadores indocumentados. Según el Departamento de Alimentación y Agricultura de California, el 75% de los 400.000 trabajadores agrícolas del estado no cuentan con estatus migratorio legal.
Con un tercio de las verduras y tres cuartas partes de las frutas y frutos secos producidos en California, cualquier interrupción en la disponibilidad de mano de obra podría tener graves consecuencias para la producción de alimentos en Estados Unidos.
Promesas y temores
Durante su campaña, Trump prometió priorizar la deportación de personas indocumentadas consideradas una amenaza para la seguridad nacional. Sin embargo, no se descarta la posibilidad de extender estas medidas a los trabajadores agrícolas, como ocurrió durante su primer mandato, cuando se realizaron redadas en plantas procesadoras y establecimientos agrícolas.
Karoline Leavitt, portavoz del equipo de transición de Trump, declaró:
"El presidente Trump implementará la mayor operación de deportación en la historia de Estados Unidos para fortalecer nuestra fuerza laboral y reducir costos para las familias."
Respuesta comunitaria y legal
Organizaciones como el Centro Binacional para el Desarrollo Indígena Oaxaqueño (CBDIO) en California han intensificado sus esfuerzos para preparar a los trabajadores. En el Valle Central, donde gran parte de los empleados hablan idiomas indígenas como mixteco y zapoteco, se realizan talleres para orientar sobre inmigración y gestionar pasaportes para hijos nacidos en EE.UU.
En Nueva York, el Programa de Trabajadores Agrícolas de Cornell ha multiplicado por diez sus talleres de inmigración desde las elecciones, ofreciendo simulaciones y consejos prácticos para enfrentar posibles encuentros con agentes de inmigración.
Consecuencias humanas
El temor a la separación familiar es una de las principales preocupaciones, ya que aproximadamente 4,4 millones de niños nacidos en EE.UU. tienen al menos un padre indocumentado, según el Pew Research Center. Este panorama añade una carga emocional significativa a la ya difícil situación de los trabajadores agrícolas.