Decenas de millones de dosis de la vacuna contra el coronavirus fabricada por la empresa británico-sueca AstraZeneca están almacenadas en las instalaciones de fabricación estadounidenses, a la espera de los resultados de su ensayo clínico en Estados Unidos, mientras los países que han autorizado su uso suplican poder acceder a ellas.
El destino de esas dosis de la vacuna de AstraZeneca es objeto de un intenso debate entre la Casa Blanca y los funcionarios federales de salud, ya que algunos sostienen que el gobierno debería dejarlas ir al extranjero, donde se necesitan desesperadamente , mientras que otros no están dispuestos a renunciar a ellas, según altos funcionarios del gobierno.
straZeneca participa en esas conversaciones.
"Entendemos que otros gobiernos se han puesto en contacto con el gobierno de Estados Unidos para la donación de dosis de AstraZeneca, y hemos pedido al gobierno de Estados Unidos que considere detenidamente estas solicitudes", dijo Gonzalo Viña, un portavoz de AstraZeneca.