Cabe recordar que los staff report del organismo, si bien analizan el desempeño del trimestre previo (el que se evalúa que en este caso es el último trimestre de 2022), también advierten cómo ven el desempeño más reciente de la economía. Y en lo que va del año los números de la Argentina se han deteriorado, por la suba del gasto público y la menor acumulación de reservas, entre otros aspectos.
Fuentes oficiales descartaron a Ámbito la posibilidad de un nuevo dólar soja y señalaron que evalúan mecanismos para lograr una mejora en la paridad para las exportaciones ? o al menos para productos clave? que también implicaría un encarecimiento de las importaciones.
En medios privados se especula con un ajuste de entre el 20 y el 30%. Una corrección superior se considera insostenible por la delicada situación social en momentos en que los precios de los alimentos ya están registrando fuertes subas.
A medida que pasan los días se siguen reduciendo las estimaciones de cosecha en medio de lo que ya es la peor sequía del siglo.
Las últimas estimaciones realizadas por la Bolsa de Cereales de Buenos Aires prevén que la producción de los tres principales cultivos -soja, maíz y trigo caería cerca de 38% con respecto a la campaña anterior.
De esta forma, la cosecha valorizada a precios promedio de exportación (FOB) para estos cultivos se hundiría en más de u$s 18.000 millones, e incluso podría alcanzar los u$s 20.000 millones, según sostiene Ecolatina.
Sin embargo, esta consultora también advierte que "dado que no hay condiciones climáticas a la vista que permitan poner pisos a los rindes o al área que no será cosechada, es probable que veamos nuevos ajustes en las próximas semanas".
Con una estimación de pérdida de divisas semejante (u$s19.000 millones), Equilibra calcula que el sector agropecuario sufriría una contracción de 17% en 2023, lo que implica una caída directa del PBI de poco más de 2% incluyendo actividades conexas.
Las menores ventas al exterior del sector agropecuario significarán un importante recorte en los ingresos fiscales del Tesoro.
La última estimación de la Bolsa de Comercio de Rosario proyecta que el aporte en materia de derechos de exportación de las cadenas agroindustriales será de u$s 6.532 millones en el año.
Esta cifra representa una caída del 33% en relación con la recaudación estimada en 2022 por el mismo concepto.
Al calcular el efecto global de la sequía sobre las cuentas fiscales, Equilibra proyecta una caída de u$s4.200 millones en retenciones (por la caída en las liquidaciones) y menores aranceles e IVA DGA (por el recorte de las importaciones). La baja del PBI también afectaría la recaudación de los impuestos ligados a la actividad.
Sin embargo, el mayor golpe provendrá de la liquidación de agro-divisas ya que el año pasado.
Esto ya se está notando y con intensidad en las ventas de divisas a las que se ve obligado el Banco Central ante la falta de dólares aportados por el campo.
Si bien los datos están distorsionados por el adelantamiento de exportaciones provocado por el dólar soja, en el primer bimestre del año, el agro liquidó sólo u$s 1.573 millones, lejos de los casi u$s 5.000 millones de igual período del año pasado y el registro más bajo de la serie desde 2005.
En este contexto, en las últimas cinco ruedas el BCRA se desprendió de u$s 554 millones con una pérdida de divisas que se acerca a los u$s 2.000 millones en lo que va del año. Como resultado, destaca Ecolatina, las reservas internacionales brutas ya perforaron los u$s 38.000 millones, al tiempo que calcula que las netas (según la metodología del FMI) ya estarían por debajo de los u$s 1.500 millones.
