La moneda norteamericana operó con tendencia al alza desde el comienzo de la jornada, mientras que el dólar contado con liquidación y el dólar MEP también mantuvieron un recorrido ascendente.
Si bien en lo que va del año el blue estuvo por detrás del Índice de Precios al Consumidor, la serie histórica no expone lo mismo. Según cálculos del economista Salvador Vitelli, la inflación entre 2011 y 2024 acumuló un 25.318%, mientras que el dólar blue escaló un 28.746%.
Por qué suben los dólares paralelos
En diálogo con Bloomberg Línea, Gustavo Quintana, analista y operador de PR Corredores de Cambio, evaluó que la suba del blue "principalmente, es una consecuencia dela baja de tasas que desalienta las colocaciones en pesos". "Estimula la dolarización de portafolios", consideró.
La baja de tasas presiona la cotización del dólar blue.
Por su parte, el economista Gustavo Ber consideró: "A la baja de tasas, tras la fuerte apreciación cambiaria de los últimos tiempos, se están sumando para explicar el reacomodamiento de los dólares financieros, las menores liquidaciones y la incertidumbre política por la Ley Bases y el paquete fiscal así como la escalada en el conflicto con España".
El analista financiero Franco Tealdi también apuntó a varias causas. Dentro de ellas, se encuentran cuestiones climáticas que atrasaron la cosecha y la liquidación, las demoras en la aprobación de la ley bases y el paquete fiscal, pero también a un escenario en el que "los inversores están ante un carry trade que da muy poco".
El Gobierno desestima la suba del blue
En conferencia de prensa, el vocero presidencial, Manuel Adorni, se refirió a la suba del blue y remarcó: "No hay razón para que el dólar tenga una implicancia en precios".
En tanto, fuentes oficiales consultadas por Bloomberg Línea, expresaron no tener preocupación porque se trata del mismo nivel de cotización con el que el Gobierno asumió en diciembre. Además, destacan la importancia de que el Banco Central continúa con la recomposición de las reservas.
Hasta dónde pueden llegar el blue, el MEP y el CCL
Según Gustavo Quintana, "el mercado todavía busca un nuevo punto de equilibrio, probablemente arriba de lo que se está viendo ahora". "En junio, a lo mejor, cambia la cosa. La primera quincena siempre es demandante de pesos", estimó.
Fernando Baer, economista asociado de Quantum Finanzas, pronosticó que los tipos de cambio paralelos "pueden moverse algo más", aunque aclaró que "en la medida en que se sostenga el superávit, no hay motivos para movimientos, más allá de algún reacomodamiento puntual".
En declaraciones a este medio, Gustavo Ber, manifestó: "Creo que en la zona de los $1.200 deberían tomarse un respiro, equivalente a una brecha del orden del 35%, a fin de evitar una mayor dolarización desde colocaciones en pesos que pudieran llegar a afectar además las expectativas de los agentes económicos".
A su vez, un análisis de la consultora Outlier, analizó: "No tenemos una respuesta clara de hasta dónde llegará el tipo de cambio, principalmente porque la suba, si bien hubo una reducción en los volúmenes liquidados, se da en un período donde la liquidación de la cosecha gruesa está avanzando a buen ritmo y aún tiene para varias semanas más".
"Refuerza nuestra presunción de que estamos ante un rebalanceo de la cartera de los agentes económicos locales, producto de la fuerte reducción de los diferenciales de tasas en dólares y con vistas a un segundo semestre con menos oferta de divisas y dudas respecto de la aprobación de la ley bases y el paquete fiscal, por un lado, y la salida del cepo en 2024, por el otro. Léase, la dolarización de una mayor porción de éstas", puntualizó.
¿La suba de los dólares paralelos puede impactar en los precios?
"En cuanto al impacto, creo que la mayoría de los precios no está tan alineada ahora en el blue, pero de persistir la suba, espiralizándose y con brecha creciente, puede tener algún impacto por cambio de expectativas", opinó Quintana.
En esa línea, Gustavo Ber indicó: "No creo, por el momento, que tenga impacto en la inflación, pero es importante que se calme el ritmo del reacomodamiento para no afectar las expectativas de los agentes económicos, dado que una ampliación demasiado fuerte y acelerada de la `brecha` podría generar distorsiones".