Dante Romano, profesor e investigador del Centro de Agronegocios y Alimentos de la Universidad Austral, analiza la situación y destaca los desafíos.
Incertidumbre Financiera y Política: Argentina enfrenta la culminación del programa de incremento exportador 70/30, que permitió a los exportadores liquidar el 30% de sus divisas en el mercado de contado con liquidación. La dualidad entre el tipo de cambio oficial y el libre crea un valor fuera de lo común para los granos. La incertidumbre sobre el futuro tipo de cambio y las liquidaciones agrícolas paralizan las decisiones comerciales.
Dólares y Decisiones: El desajuste entre los precios en pesos y el tipo de cambio oficial plantea desafíos para los productores. A pesar de los precios atractivos en pesos, la necesidad de capital en dólares para afrontar la siembra, alquileres y otros costos, genera dilemas sobre la redolarización de ingresos.
Cosecha en Marcha y Decisiones Pendientes: Con la cosecha de trigo en curso, la incertidumbre sobre el tipo de cambio desalienta a muchos productores a vender. A pesar de los precios favorables en la nueva cosecha, la prolongación del programa 70/30 podría generar precios aún más altos, complicando las decisiones comerciales.
Recomendaciones y Estrategias: Ante este panorama, Dante Romano sugiere a los productores asegurar rentabilidad y recuperar el capital variable mediante estrategias como cerrar las relaciones insumo-producto y considerar opciones como las CALL locales.
Perspectivas en la Producción: El informe del USDA proyecta una destacada siembra en Argentina, con 48 millones de toneladas de soja, casi el doble del año anterior, y una producción récord de maíz de 55 millones de toneladas. La siembra de trigo, sin embargo, se enfrenta a desafíos climáticos y estimaciones divergentes.
Desafíos Locales e Internacionales: Aunque el clima en Argentina presenta condiciones favorables para la producción de soja y maíz tardío, Brasil experimenta retrasos debido a la sequía, afectando la planificación de siembras. La incertidumbre sobre la producción de trigo y las exportaciones complica aún más el panorama.
En resumen, mientras la naturaleza favorece la siembra récord, la incertidumbre financiera y política arroja sombras sobre los negocios agrícolas en Argentina. La dualidad entre precios atractivos y riesgos futuros deja a los productores en una encrucijada crucial.