Los datos que surgen de la estadística de traslados de hacienda que informa el SENASA muestran que, durante el mes de febrero, la cantidad de terneros y terneras que fueron movidos desde los campos con motivo de cría o invernada, ascendió a 826.032 cabezas, apenas un 34% más que los trasladados durante el mes de enero, cuando históricamente, el salto entre el primer y segundo mes del año suele ubicarse por arriba del 50%.
No obstante, en números absolutos, la cantidad de traslados no muestra un dato menor. Por el contrario, en los dos primeros meses de este año el registro de movimientos asciende a 1,44 millones de terneros/as, el segundo registro más alto de los últimos años.
Lo interesante a destacar es el destino de esta invernada. Del total de terneros/as que salieron de los establecimientos en estos dos primeros meses del año, el 77% (1,10 millones) tuvo por destino otros campos mientras que el 23% (338 mil) habría ingresado, según DTEs. a corrales de engorde.
En suma, los sistemas de recría e invernada a campo recibieron en estos dos primeros meses del año un 13% más de terneros/as que en igual período del año pasado. Sin embargo, no se detecta una caída en los ingresos a feedlots. Por el contrario, la cantidad de cabezas ingresadas durante enero y febrero de este año (338 mil cabezas) resulta ligeramente superior a lo informado un año atrás. En efecto, la cantidad de hacienda encerrada al 1ro de marzo asciende a 1,730 millones de animales de los cuales el 42% (724 mil cabezas) son terneros/as y otro 43% (741 mil cabezas) son novillitos y vaquillonas. En suma, un stock de animales encerrados 7% superior al reportado a igual fecha del año pasado y récord para ese mes desde que se disponen estos datos del SENASA.
En cuanto a niveles de salida de los feedlots, febrero registró unos 385 mil animales terminados en los corrales, esto es un 3% menos que lo ofertado en enero y apenas un 2% más que en febrero de 2024.
Habrá que esperar al menos unos tres a cuatro meses para que estos terneros que hoy están ingresando a los corrales de engorde comiencen a salir al mercado como hacienda liviana terminada a grano.