Como consecuencia de la sequía, los productores cañeros de Jujuy y Salta, advierten pérdidas que podrían superar el 50% de la producción y solicitan a los gobiernos medidas urgentes para poder paliar la crisis que golpea a la actividad en las últimas campañas y de la cual dependen miles de fuentes de trabajo
"La mayoría de las plantaciones presentan un escaso desarrollo debido al grave estrés hídrico que vienen padeciendo por la fuerte sequía. Esto sumado a la falta de financiamiento para la renovación de cañaverales pronostica "una fuerte caída en la producción que superaría el 50% para la zafra 2023 que se iniciaría en los próximos meses", aseguraron desde la Unión Cañeros Independientes de Jujuy y Salta (Ucijs).
"La situación del sector es muy grave y especialmente la de los productores cañeros independientes", advirtieron.
"Este año muchos productores podrían quedar en el camino", señalaron con preocupación.
"El año pasado tuvimos una pedida de más del 30% y este año vamos superar el 50% debido a una sequía que viene golpeando fuertemente a la producción en las últimas tres campañas", alertaron desde la entidad.
Esta situación los coloca económicamente "al borde del quebranto". Razón por la cual solicitan a los gobiernos medidas urgentes para afrontar esta difícil situación y así poder "garantizar la continuidad de la producción y las miles de fuentes de trabajo que dependen de esta actividad", afirmaron desde la Ucijs.
El reclamo: baja de impuestos y créditos para el sector
Para atender esta problemática del sector, advertida por los productores al inicio del 2022, se conformó una Mesa Regional de la Producción Azucarera: integrada por las carteras de producción de los Gobiernos de Jujuy y Salta, representantes de la Unión de Cañeros Independientes de Jujuy y Salta, y de los Ingenios Azucareros de ambas provincias, entre otros actores vinculados al sector, explica el comunicado.
En aquella oportunidad los cañeros plantearon la necesidad urgente de contar con el diferimiento o baja en los aportes patronales, diferimiento o eximición del pago del impuesto a las ganancias, otorgamiento de créditos para renovación de cañaverales con tasas bajas y periodos de devolución acorde a los ciclos productivos, búsqueda de créditos a largo plazo con periodos de gracia para inversión en nuevas y mejores tecnologías de riego.
También desgravar la actividad del impuesto a los ingresos brutos, condonar el impuesto inmobiliario y canon de riego hasta finalizar la emergencia, baja de impuestos en la energía eléctrica para poder hacer uso del bombeo lo que hace al riego más eficiente y rápido. Y entre las acciones a largo plazo señalaron la necesidad de realizar obras de captación y almacenamiento de agua (diques) y mejorar las ya existentes, revestimiento de canales y mejorar la conducción para evitar pérdidas, mejoramiento en las tomas de agua de los consorcios de riego, créditos para perforación de pozos.
Comunicado de Feprojuy