En diálogo con radio LT9 de Santa Fe, planteó que, si alguien saliera a protestar por la medida, habría que decirle que "van a defender la rentabilidad de siete grandes empresas".
En ese sentido, Buzzi consideró que el aumento de dos puntos a las retenciones de la harina y el aceite de soja "no debería impactar en los productores, porque a ellos ya le sacan el 33% de retenciones".
De esta forma se refirió al anuncio realizado el sábado último por el ministro de Agricultura, Ganadería y Pesca, Julián Domínguez, sobre la suspensión temporaria del diferencial de 2% de los derechos de exportación de harina y de aceite de soja, que vuelven al 33%, porcentaje que ya las empresas le descontaban al productor.
"Se quedan con el 2% de rentabilidad y hacen sus negocios. Estas empresas, cuando llega el gran flujo de venta de granos de los productores, se cartelizan y más de una vez no pagan el precio del valor internacional, multiplicado por el tipo de cambio", indicó Buzzi.
Por otra parte, negó que haya un clima similar al que generó las protestas de las patronales del campo en 2008 por la Resolución 125, que establecía retenciones móviles.
"Este 2% no es un clima de la (Resolución) 125. No es un manotazo confiscatorio de todos los rubros a todos los productores. Pero cuando se necesitan recursos, hay todo un debate de dónde salen los recursos. Está bien que le saquen el 2% a las aceiteras. Es un manotazo justificado", completó Buzzi.
Además, el dirigente explicó que, "durante más de 30 años, desde los '90, las aceiteras multinacionales, hacen los verdaderos negocios de la harina y el aceite de soja".
"En los '90 había tres puntos diferenciales entre el poroto y el producto. (El expresidente, Mauricio) Macri le sacó ese diferencial, Alberto (Fernández) le restituyó dos puntos, y ahora, en una situación crítica, lo que se hace es poner en la misma proporción el poroto de soja con los derivados. Son US$ 400 millones de rentabilidad de un puñado de empresas", agregó Buzzi al expresar su respaldo a la medida.