El Gobierno oficializó este lunes el inicio del proceso de privatización total de la empresa Belgrano Cargas y Logística S.A., precisando el esquema elegido para efectivizar la medida, mediante la publicación del Decreto 67/2025 en el Boletín Oficial.
La decisión que había sido anticipada el sábado pasado por el vocero presidencial, Manuel Adorni, es la cristalización del aval otorgado por el Congreso para avanzar con el traspaso de la empresa al sector privado cuando se sancionó la Ley Bases, al estar en la nómina de las compañías sujetas a privatización.
Al respecto, desde la administración de Javier Milei, expresaron que "la medida se fundamenta en el cumplimiento de la Ley de Bases y la convicción política de reducir la participación del Estado en actividades empresariales".
En el texto reglamentario quedó estipulada la modalidad en la que se llevará a cabo el desprendimiento de la empresa al detallar que será "mediante la desintegración vertical y la separación de las actividades y bienes de cada unidad de negocio, entre ellos: el material rodante, las vías e inmuebles aledaños y los talleres".
En este sentido, se especificó que por un lado tendrá lugar un remate público para la venta del material rodante, mientras que por otro lado se avanzará con la celebración de contratos de concesión de obra pública para las vías y sus inmuebles aledaños, y el uso de los talleres ferroviarios.
De esta manera, la operatoria de las líneas Belgrano, San Martín y Urquiza, pertenecientes a la firma privatizada, se licitarán por separado y en cada una de ellas se realizarán otra serie de licitaciones individuales para determinar qué oferentes se quedan con el manejo de las locomotoras, los vagones y los talleres.
El Ejecutivo aclaró que "los terrenos y las vías continuarán siendo propiedad del Estado ya que revierten al mismo al finalizar la concesión" y determinó que "el Ministerio de Economía será a través de la Agencia de Transformación de Empresas Públicas (ATEP), quien procederá a adoptar todas las medidas necesarias para dar cumplimiento a lo establecido".
En la argumentación expuesta en el documento oficial, el Gobierno citó una serie de informes realizados en el marco de la "Evaluación de Desempeño del Sistema Ferroviario", en los que se indicaba que "el estado tanto de la infraestructura ferroviaria como del material rodante afectado a los servicios requiere la adopción de medidas eficaces y urgentes, así como las fuentes de financiamiento correspondientes".
En la misma línea, puso el foco en la necesidad de invertir en infraestructura al señalar que "con el objeto de incrementar el volumen de carga y lograr una operación económica y financieramente sustentable de las Líneas General Belgrano, General San Martín y General Urquiza, gestionadas por Belgrano Cargas, los informes precitados también indican que se requiere un nivel de inversión en infraestructura e incorporación de material rodante que excede las posibilidades de generación de fondos y de capacidad de endeudamiento de la referida empresa y del Estado Nacional".
Además, sostuvo que "desde su creación, Belgrano Cargas ha sido deficitaria y que a pesar de los esfuerzos realizados por el Estado Nacional para disminuir el déficit, aún requiere de una relevante asistencia del Tesoro Nacional".