El rendimiento promedio de soja en el centro y norte de la provincia de Santa Fe cayó 6,1% en la campaña que finalizó en junio respecto de la anterior, pero los productores obtuvieron resultados económicos favorables debido al aumento de los precios, indica un informe publicado hoy por la Bolsa de Comercio de Santa Fe.
"Es importante remarcar que la productividad estuvo por debajo de los niveles de las últimas tres campañas sojeras precedentes", añade el trabajo, que precisa que "el rinde promedio por hectárea se ubicó en 30,3 quintales", es decir 6,1% menos que la campaña 20/21 y 12,5% respecto de la 19/20.
La producción total de soja en los doce departamentos del centro y el norte provincial fue de 4.480.555 toneladas, un 6,1% por debajo de 20/21.
En soja de primera, la producción final fue de 3,1 millones de toneladas, 280 mil menos que la campaña pasada, mientras que para soja de segunda la producción fue de 1,4 millones de toneladas, un registro casi idéntico al del ciclo 20/21.
"Si bien el rinde promedio de la actual campaña estuvo un 6,1% por debajo de la campaña 20/21 y los costos totales de cosecha se incrementaron notablemente, los precios promedios observados en el mercado local permitieron a los productores de la zona obtener resultados económicos favorables", señala el informe.
En ese sentido, la Bolsa de Comercio de Santa Fe indicó que se trató de un "escenario caracterizado por una fuerte presión alcista en los precios de los commodities agrícolas y agroindustriales a nivel internacional, por el conflicto bélico entre Rusia-Ucrania e intensificado aún más por las condiciones climáticas de sequía en Sudamérica".
Las cotizaciones de pizarra del mercado de Rosario llegaron a un máximo precio diario en marzo de 2022, con un valor de 457,15 dólares por tonelada, el más elevado desde marzo de 2014.
Tomando como referencia el mes de mayo y primera quincena de junio -período de mayor actividad de cosecha de soja en la región- el promedio este año fue de 418,6 dólares la tonelada, lo cual significa un 80,8% más que igual promedio del año pasado.
El informe remarca, que "si bien las cotizaciones internacionales lideraron el alza e impactaron sobre el mercado, el productor local no se benefició en la misma cuantía debido al desdoblamiento cambiario y vía efecto de retenciones a la oleaginosa en nuestro país".