La situación climática se agrava con la producción de tormentas localmente fuertes, especialmente en la Ciudad de Buenos Aires, donde ya se han registrado inundaciones significativas.
En la Ciudad de Buenos Aires, las temperaturas mínimas han rozado récords históricos, comenzando el día con 28,4 °C, casi igualando el récord de temperatura mínima más alta para febrero alcanzado el año pasado. La combinación de alta humedad y temperaturas extremas ha disparado la sensación térmica a niveles alarmantes.
En el mercado local de Rosario, el precio de la soja se movió en torno a los $260.000, mientras que el maíz y el trigo también enfrentaron variaciones significativas en sus precios debido a las condiciones climáticas.
Las lluvias y tormentas han comenzado a ganar protagonismo en el sur de la región Pampeana, con un frente semi estacionario que favorece precipitaciones intensas entre La Pampa y el centro-sur de Buenos Aires. Se han registrado áreas de lluvias recientes muy abundantes, con focos de más de 100 mm entre el este de La Pampa y el oeste de Buenos Aires, indicando que aún queda "mucha más agua por caer" en los próximos días.
El Servicio Meteorológico Nacional ha emitido alertas por tormentas fuertes a severas en varias provincias, destacando áreas de San Luis, Córdoba y La Pampa con alerta naranja, donde se podría experimentar caída de granizo, fuertes ráfagas y abundante caída de agua con montos estimados entre 60 y 90 mm.
Para el fin de semana largo de Carnaval, se prevén lluvias generalizadas y abundantes en las provincias centrales, con tormentas fuertes en un ambiente muy tropical. Se esperan los mayores acumulados de lluvia en Córdoba, Buenos Aires, Capital Federal, Entre Ríos y buena parte de Santa Fe, con valores que podrían superar los 100 mm en pocas horas.
Con la llegada de un frente frío más marcado durante los feriados de Carnaval, se anticipa un definitivo descenso térmico en el país, poniendo fin a la ola de calor y manteniendo condiciones inestables, especialmente en las provincias del norte argentino.
Esta situación climática extrema resalta la importancia de la preparación y la precaución ante los efectos combinados de la ola de calor, las lluvias abundantes y las tormentas fuertes, especialmente para aquellos que planean celebrar el Carnaval al aire libre.