En las últimas semanas, el precio de la carne experimentó subas relacionadas con la recuperación del valor de la hacienda en pie. Y, según detallan desde el sector, estas "correcciones" todavía no terminaron.
El termómetro lo marca el valor de la hacienda en pie que se negocia en el Mercado de Cañuelas. En los últimos meses, se registraron incrementos que se trasladaron en una buena medida al mostrador.
Sin embargo, tal como destacan desde el sector, todavía se registra un atraso muy marcado frente a las distintas variables del a economía. Por lo que no se descartan nuevas subas.
De acuerdo al informe que elabora la Cámara de la Industria y Comercio de la Carne (CICCRA), en el arranque del año "el precio promedio de la hacienda en pie negociada en el mercado de Cañuelas siguió recuperándose y a mayor ritmo que en los dos meses previos: un 12,3% mensual".
"Con la suba de enero, el precio promedio en pesos ya recuperó toda la pérdida registrada entre agosto y octubre del año pasado", destacaron desde la entidad.
Aunque aclararon: "Pero, más allá de la recuperación de los últimos tres meses, el valor de la hacienda en pie registró un incremento de apenas 45% en los últimos doce meses. Es decir, logró interrumpir el proceso de desaceleración (había llegado a 31,6% anual en diciembre de 2022), pero la velocidad de crecimiento interanual del precio nominal del kilo vivo sigue muy por debajo del ritmo de aumento que exhiben las demás variables nominales de la economía".
La inflación minorista para el mismo período superaría, según estimaciones privadas, el 95%.
En ese sentido, según explicó el presidente de la Cámara de Abastecedores y Matarifes (CAMyA), Leonardo Rafael, la carne "estuvo muy barata durante 2022, con un retraso de entre el 60% y 70%". Por eso, anticipó, todavía "queda todavía un aumento del 15% o 20%".
Impacto en la inflación "El mercado de la hacienda es oferta y demanda. Hubo más oferta de lo que necesitaba la demanda, además del tema climatológico que la sequía hizo adelantar la faena.
Por lo que era un producto que era barato en relación a cualquier producto de la canasta", detalló Rafael, quien agregó que podría haber nuevos aumentos en el mostrador: "No sabemos si será en febrero o en marzo cuando esté el caudal de gente en las calles".
Los aumentos del precio de la carne que pagan los consumidores rondaron entre el 20% y el 30% en las últimas semanas. Se trata de subas que, irremediablemente, impactarán en la inflación (sobre todo, en la medición de febrero).
Por caso, de acuerdo al índice de precios de alimentos que realiza la consultora LCG, en la última semana de enero las carnes aumentaron un 5,3% frente a la semana previa: se trató, destacaron desde la firma, de la mayor suba desde septiembre.
En tanto, de acuerdo al relevamiento de precios minoristas de la consultora Eco Go, en la primera semana de febrero se registró una variación de 2,8% en el precio de los alimentos con respecto a la semana previa.
"Se trata de la mayor variación semanal desde marzo pasado", destacaron desde la firma.
"Para febrero, esto puede terminar impactando en la inflación general: de hecho, algo puede repercutir en enero, cuando hubo un aumento parcial de los cortes de carne. Pero definitivamente vamos hacia un escenario con el precio de la carne en alza, recuperando parte del terreno perdido el año pasado", analizó al respecto Damián Di Pace, director de la consultora Focus Market.
Por Andrés Randazzo