Los futuros de la oleaginosa en EEUU trepanan casi 3%, hasta alcanzar un máximo de tres meses, ya que los pronósticos meteorológicos para las principales áreas de cultivo del norte volvieron a ser húmedos, lo que amenazó con aumentar retrasos a una siembra que ya estaba muy demorada.
Los futuros de la soja en Estados Unidos se disparaban casi 3%, hasta alcanzar un máximo de tres meses este jueves, ya que los pronósticos meteorológicos más recientes para las principales áreas de cultivo del norte volvieron a ser húmedos, lo que amenazó con aumentar retrasos a una siembra que ya estaba muy demorada, dijeron operadores.El contrato de futuros de la soja más activo de la Bolsa de Chicago se encaminaba a lograr su mayor aumento porcentual diario desde el 1 de marzo , en un momento en que los operadores digirieron lo que significarían los retrasos para las perspectivas de cosecha en lugares como Dakota del Norte y Minnesota.
Así, la soja a julio subía un 2,8% a u$s635,19, cada vez más cerca de su récord histórico de u$s650 registrado en 2021. La oleaginosa, que había cotizado en territorio negativo durante gran parte de la sesión global, alcanzó su precio más alto desde el 24 de febrero.
Los futuros del maíz , en cambio, bajaban levemente debido a la presión de datos de exportación decepcionantes, mientras que el trigo avanzaba, impulsado por los contratos de trigo de primavera ante expectativas de otra desaceleración en la siembra en las llanuras del norte de Estados Unidos.
La fortaleza del crudo respaldó también a la soja.
El contrato de referencia del trigo a julio subía levemente y se ubicaba en torno a los u$s423. Commodity Weather Group dijo en una nota a clientes que las lluvias interrumpirían a partir del sábado la siembra en Dakota del Norte, Dakota del Sur y Minnesota, los estados más retrasados debido al clima frío y húmedo durante la primavera boreal.
En tanto, el maíz a julio bajaba 0,8% a u$s301,57. El Departamento de Agricultura de Estados Unidos dijo que las ventas de exportación semanales de maíz totalizaron 210.000 toneladas, por debajo de las previsiones que oscilaban entre 350.000 y 1,3 millones de toneladas.