Directivos de la Confederación Intercooperativa Agropecuaria (Coninagro) presentaron ayer al ministro de Agricultura, Luis Basterra, un plan de diez puntos que, entre sus principales aspectos, busca un crecimiento de 3 puntos en el PBI, de la mano de una producción de 150 millones de toneladas, exportaciones por USD 100.000 millones y la creación de 700.000 puestos de trabajo.
Si bien los cooperativistas reconocieron que hablaron con el resto de las entidades gremiales del campo sobre este programa, la presentación del plan encuentra a la Mesa de Enlace con una división interna cada vez más visible.
La videoconferencia del presidente de Coninagro, Carlos Iannizzotto, con el ministro Basterra ocurre en el contexto de un gremialismo rural que no logra sellar un frente común.
Si bien las diferencias quedaron en un segundo plano con la irrupción de la pandemia de coronavirus, la foto del titular de la Sociedad Rural (SRA), Daniel Pelegrina, junto al presidente Alberto Fernández el 9 de julio pasado es un golpe difícil de digerir para este espacio.
La propuesta de los cooperativistas busca, en el contexto de una fuerte caída de la actividad económica, generar un crecimiento del PBI de 3 puntos en los próximos tres años, en el marco de un incremento de la producción granaria y de las ventas del complejo agroindustrial.
En una conferencia de prensa virtual posterior al encuentro, Iannizzotto estimó que este objetivo se puede alcanzar en la medida en que se estimule tanto el mercado interno como externo y con una disminución de la presión tributaria por parte del Estado y acceso al financiamiento.
En un documento presentado por los cooperativistas, señalaron que si logran captar el 5% de los ahorros argentinos a través de incentivos para ampliar el mercado de capitales, tanto con fideicomisos productivos como fondos especiales regionalizados, éstos se podrían destinar a impulsar las economías regionales.