El estrés en el caballo es muy frecuente, especialmente si está obligado a vivir encerrado en un espacio pequeño.
El caballo es un animal naturalmente ansioso y eso se debe a su propio estatus como presa en la naturaleza. Antes de ser domesticado, su supervivencia dependía de su capacidad para huir a tiempo y lo más rápido posible. Por ello, su instinto lo mantiene en estado de alerta y prefiere pastar en un lugar grande y abierto, para así poder protegerse de eventuales depredadores.
Las causas
Los equinos son animales sociales, les gusta vivir en grupos, y una de las principales causas de estrés en el caballo es la separación de sus semejantes. El caballo que no tiene una alta posición en la jerarquía del grupo, se tranquilizará al saber que el líder está pendiente de cualquier posible amenaza y avisará inmediatamente a su manada.
Este tipo de comportamiento se cumple especialmente en los caballos jóvenes, cuya educación se hace a través de los demás caballos mayores del grupo. El destete es otra de las causas de su estrés y a esta separación a menudo se añaden otro tipo de situaciones que le generan ansiedad.
Los cambios en su entorno son muy estresantes para este animal, así como si se le obliga a realizar un trabajo excesivo para sus fuerzas, o debe transitar por lugares empinados, de difícil acceso o con muchos obstáculos. Las carreras de velocidad también causan estrés y ansiedad en la gran mayoría de los equinos.
Estrés por alimentos
El tipo de alimentos que ingiere un caballo y el lugar en que los consume, son causas comunes de estrés.
En la naturaleza, el caballo come en pequeñas cantidades y durante todo el día. El caballo deportivo en cambio, que vive en un establo y recluido en un espacio limitado, come en varias etapas y en un breve espacio de tiempo.
Esperar a que le den de comer provoca ansiedad en un caballo en cautiverio. No así en los caballos que viven en el campo, ya que si se encuentra libre, mordisquea continuamente las hierbas, de forma totalmente tranquila y a su gusto.
El estrés en el caballo genera trastornos en su comportamiento, como la denominada aerofagia, en donde el caballo traga aire mientras muerde un objeto como una puerta o un poste. Este comportamiento es bastante peligroso para la salud del animal, ya que la aerofagia está directamente vinculada a los cólicos y las úlceras gástricas, además de causar un desgaste prematuro de los incisivos.
Por Luciano Balaudo