Un aspecto poco conocido del maíz tardío es su economía del nitrógeno (N) y la relación con los rendimientos. Una investigación realizada en Entre Ríos por el Inta Paraná y la Facultad de Agronomía de la Universidad de Buenos Aires (Fauba) determinó que la eficiencia en el uso del nitrógeno de este cultivo fue 19% menor que la del maíz temprano.Las causas se vincularon con los menores rindes y la mayor disponibilidad de nitrógeno en el suelo en fechas de siembra tardías.
Nicolás Maltese, profesional del Inta, estudiante de doctorado en la Escuela para Graduados (EPG) de la Fauba, y becario del Conicet, explicó que usaron dos híbridos que diferían notablemente en su capacidad de absorber N del suelo. La siembra temprana la realizaron a mediados de septiembre, y la tardía, a mediados de diciembre.
El resultado más importante del experimento es que el maíz tardío usó menos eficientemente el nitrógeno (EUN). Su EUN fue de 26 kg grano/kg de nitrógeno en el suelo, mientras que la del temprano fue 32 kg grano/kg de nitrógeno en el suelo, lo cual representa una caída de casi 19%.
Gustavo Maddonni, docente de la cátedra de Cerealicultura de la Fauba indicó que "por las condiciones lumínicas y térmicas que uno y otro deben atravesar, los rendimientos de los tardíos tienden a ser menores que los tempranos. Esta es una de las causas de la caída en la EUN, ya que el rendimiento es el numerador en el cálculo de la eficiencia".
Además- agregó Maddonni, quien también es investigador del Conicet- la siembra tardía permite que el barbecho sea prolongado, con lo cual se acumula una buena cantidad de agua en el perfil. Esto, sumado a que las temperaturas son relativamente altas en ese momento, estimula la mineralización de la materia orgánica del suelo. Por lo tanto, en fechas tardías hay más nitrógeno disponible, y como es el denominador de la EUN, también es una explicación para las bajas eficiencias que se detectaron.
En este contexto, Maltese puntualizó que la eficiencia en el uso del nitrógeno del maíz tardío cayó aún más cuando se lo fertilizó con N. "Al agregar nitrógeno en la etapa vegetativa del cultivo elevamos su disponibilidad en el suelo, que de por sí ya era alta por la mineralización. En estas condiciones comprobamos que el cultivo fue poco eficiente para absorber ese N 'en exceso'. Esa alta disponibilidad terminó afectando a la NUE incluso más que la caída en el rendimiento".