En las últimas horas, siete camiones con peras y manzanas proveniente del Alto Valle de Río Negro, principal región argentina productora de estas frutas, no pasaran los controles sanitarios en la frontera con Brasil por presencia de Carpocapsa.
Brasil tiene un política de tolerancia cero con respecto a la plaga por lo que suspendió temporalmente la importación de los productos del sur argentino.
La medida fue comunicada por la Secretaría de Defensa Agropecuaria de la República Federativa de Brasil que publicó en el Boletín Oficial la Resolución que suspende el Plan de Trabajo acordado para el envío de frutas frescas desde la Argentina.
Del lado argentino, el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) confirmo la suspensión. En un comunicado oficial se informó que ahora tanto las autoridades del Senasa, las de la Secretaría de Agroindustria, y la de los gobiernos de Neuquén, Río Negro y Mendoza, "se encuentran realizando gestiones para revertir la suspensión de la exportación de peras y manzanas dispuesta por Brasil ante la detección de larvas de carpocapsa (Cydia pomonella, también conocida como polilla de la manzana) en cargamentos inspeccionados en la frontera".
El corte de las compras desde Brasil tiene impacto directo sobre todo en la economía regional del Alto Valle de Río Negro y Neuquén, que exporta cada año a ese destino 25% de su cosecha de peras y manzanas.
El Senasa también informó que trabaja junto a los productores y exportadores "a cuyos cargamentos enviados con destino al vecino país se le detectaron larvas vivas de la plaga". En estos casos se decidió la "suspensión de establecimientos, unidades productivas, galpones de empaque y exportadores" de los portadores de la fruta infectada. Esto además implica una investigación documental y técnica para encontrar las razones de la presencia de la plaga según lo acordado en dicho plan de trabajo".
El vicepresidente del Senasa, Guillermo Rossi, dijo a Bichos de Campo que desde el organismo sanitario argentino se vienen "aplicando todas las medidas contempladas en el plan de trabajo acordado con Brasil en 2015 y que hasta ahora había dado muy buenos resultados, pero este año se han dado intercepciones. Por ello extremamos los controles, un trabajo que estamos realizando junto con las provincias, el sector privado, con quienes nos reunimos la semana pasada".
Productores
En tanto, del lado de los productores las culpas se tiraron para el lado de las autoridades. En declaraciones a Agritotal, el productor y dirigente de la ciudad de Cipolletti, Horacio Pierdominici, pidió la renuncia de los presidente del Inta, Senasa y de la Fundación Barrera Zoofitosanitaria Patagónica (Funbapa). "En la cadena de la fruticultura los únicos que viven mal son los pequeños productores", dijo